Con la dispensa de dos debates y en medio de una amplia discusión, el pleno del Congreso Nacional aprobó ayer la contratación de mil nuevos efectivos para las Fuerzas Armadas de Honduras con
la Tasa de Seguridad serán para el equipamiento y dotación de indumentaria militar a los nuevos mil efectivos militares, pero sus salarios saldrán del presupuesto regular de la Secretaría de Defensa, correspondiente a los nueve meses del presente año.
Voces en contra
El parlamentario de la Unificación Democrática, Sergio Castellanos, expresó su total rechazo a la iniciativa de ley, bajo el argumento que en este momento no es de prioridad nacional la contratación de mil nuevos soldados, sino más policías para combatir la delincuencia que azota a los hondureños.
Castellanos aclaró que no está en contra de las Fuerzas Armadas, pero manifestó que los recursos económicos del Estado son limitados y las prioridades del país son otras.
De su lado, el liberal Yuri Sabas recordó que cuando se creó la Tasa de Seguridad se estableció claramente que los fondos de esta iniciativa no deberían estar destinados al pago de salarios u otro gasto que no fuera la dotación de equipo para la Policía y los operadores de justicia.
En ese sentido, aseveró que la contratación de personal con fondos de la Tasa de Seguridad distorsiona el espíritu original de la Ley de Seguridad Poblacional.
Por su parte, el diputado de la UD, Marvin Ponce, quien en su juventud fue artillero militar en Pinalejo, expresó su oposición y dijo que el Estado enfrenta un enorme déficit fiscal y más bien necesita recursos para cumplir con los sueldos atrasados a los maestros y la compra de medicinas en los hospitales.
“Aquí hay bastantes prioridades y el Estado no ha recaudado los fondos necesarios, hay problemas para pagarle los salarios a los maestros y cómo va haber dinero para más militares, debemos poner los huevos en diferentes canastas”, arguyó. A su juicio, la contratación de estos mil efectivos militares viene a degenerar el sentido de la Tasa de Seguridad, la cual se está utilizando como “bolsa de pisto que todo mundo quiere agarrar”.
“No hay medicinas en los hospitales y es una tristeza ir al Hospital Escuela porque los pacientes no tienen medicinas. No es posible que se invierta en esto y se estén descuidando otras aéreas prioritarias, el déficit fiscal es de unos 30 mil millones y estamos en un año político en el que se requiere mucho dinero”, apuntó.
Oficialismo defiende
A los cuestionamientos de sus compañeros, el nacionalista Mauricio Oliva respondió que el crimen organizado tiene su mayor espectro de influencia en la zona norte del país y es por eso que el Poder Legislativo aprobó recientemente a las FF AA la contratación de lanchas para ejercer soberanía y combatir el narcotráfico, pero ahora se busca fortalecer la capacidad de la institución para el combate de la inseguridad.
Expresó que las Fuerzas Armadas ha venido ejerciendo labores de combate a la inseguridad y estos mil efectivos reforzarán las labores de la Policía en las calles. Aclaró que estos mil efectivos serán equipados con los recursos de la Tasa de Seguridad, pero sus salarios se pagarán con el presupuesto regular de la Secretaría de Defensa.
El diputado presidente, Juan Orlando Hernández, también defendió la medida argumentando que las Fuerzas Armadas han venido realizando labores policiales y estos 89.7 millones de lempiras servirán para contratar mil efectivos multipropósitos, es decir, que presten labores policiales, defensa de la soberanía y protección del bosque.
A lo anterior se suma que en los próximos meses las Fuerzas Armadas pasan al mando del Tribunal Supremo Electoral (TSE) para garantizar la seguridad y traslado del material electoral en las elecciones generales de noviembre próximo.
Los mil soldados contratados estarán distribuidos en las ramas Ejército, Fuerza Naval y la Fuerza Aérea.
Hernández pidió una consideración especial al tema y dijo que este Gobierno recibió el país con una “metástasis” en materia de seguridad y por consiguiente la urgencia de contratar este nuevo personal militar tiene como fin compensar la reducción o el decrecimiento de la fuerza policial por motivo de la depuración policial.
“Le pedimos a las Fuerzas Armadas hacer labores de policía, pero estamos en un proceso de depuración y certificación de la Policía, lo que ha menguado la fuerza policial”, señaló.
El congresista apuntó que el fortalecimiento de las Fuerzas Armadas con estos nuevos soldados vendrá a suplir las labores de los policías que saldrán por motivo de la depuración, mientras la institución se robustece con nuevos elementos certificados.
Explicó que los 89.7 millones de lempiras que saldrán del Fondo de Seguridad será para logística y equipamiento del nuevo personal militar, pero se hará un requerimiento presupuestario adicional a la Secretaría de Finanzas para pagar los salarios del personal por los siete meses que restan del presente año.
