Tegucigalpa
Esther Gutiérrez, representante de una empresa campesina en Chinacla, La Paz, que alberga a 84 familias productoras, tiene la fe en que con los fondos que otorgó España mejorarán sus condiciones de vida.
“En esta zona no hay ingresos, vivimos del campo, por lo que esto nos viene a beneficiar grandemente”. Esther se dedica a la producción de chile dulce, tomate, frijol, plátano, maíz y yuca, contó que la mayoría de lo que producen es para consumo de su hogar y muy poco lo comercializa; sin embargo, a través del proyecto espera aumentar la producción para comercializar más.
Son más de 30,000 familias del corredor seco en el occidente del país que serán beneficiadas con el Proyecto Integral de Desarrollo Rural y Productividad que se realizará a través del apoyo financiero del Gobierno de España y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En su viaje al país europeo, la presidenta Xiomara Castro firmó la obtención de un préstamo por 35 millones de dólares por parte del Gobierno español y otro financiamiento de 55 millones de dólares del BID, fondos que serán utilizados para apoyar a pobladores de 88 municipios de La Paz, Intibucá, Lempira, Santa Bárbara, Copán y Ocotepeque.
El proyecto denominado Prooccidente tiene cuatro componentes que se enfocan en mejorar las condiciones de vida de los pobladores de ese corredor que es uno de los más vulnerables ante los efectos del cambio climático. Consiste en incrementar de manera sostenible los ingresos de las familias beneficiadas a través de apoyo financiero, acceso a crédito, asistencia técnica, ampliación a mercados para comercializar sus productos agrícolas.
De los $90 millones (unos 2,250 millones de lempiras) se destinarán $20 millones para la adopción de tecnología para la mejora de la calidad de los productos; se les se proporcionará apoyo financiero no reembolsable.
“Son tecnologías orientadas a incrementar la productividad en sus pequeñas parcelas, estamos hablando de sistemas de riego por goteo y fertilización, instalaciones de pequeños reservorios de agua para que mantengan sus cultivos, utilización de macrotúneles para que puedan producir y comercializar hortalizas durante todo el año”, explicó Héctor Barletta, oficial de comunicaciones del proyecto Prooccidente. Unos $46 millones se usarán para el componente de fortalecimiento de desarrollo productivo.
Lo que se busca es apoyarlos para abrirse a los mercados nacionales y hacer sostenibles los productos en condiciones climáticas, de esos $34.5 millones serán para que los beneficiados accedan a créditos.
Para la asistencia técnica integral hay $22.5 millones, allí se va a proveer asistencia técnica a productores elegibles para que fomenten la participación de mujeres y jóvenes en actividades agrícolas. Además hay $2 millones para el manejo y conservación de microcuencas en la zona, así garantizar el abastecimiento de agua para consumo y los cultivos.
Durante su visita a España, la ministra de la SAG dio a conocer que el proyecto será oficialmente lanzado la próxima semana.
El corredor seco comprende desde la frontera con Guatemala a la de Nicaragua por el margen oeste, posee una población de 2.5 millones de personas con una de las mayores tasas de pobreza en el país. A través del proyecto se pretende que unas 15,000 familias salgan de la pobreza.
Laura Suazo, ministra de Agricultura y Ganadería (SAG), quien viajó a España, resaltó que el proyecto va destinado “a calmar el hambre en el corredor, a producir, pero no solamente dedicarse a un cultivo, sino buscar una manera de cómo integramos la agricultura a la generación de un ingreso”.