16/04/2024
12:06 AM

PMA solicita una visión a largo plazo ante efectos de la sequía

Representante de este organismo destacó que Honduras ya cuenta con una visión estratégica.

    Tegucigalpa, Honduras.

    Ante los efectos del cambio climático que entre ellos está la sequía que ataca principalmente al Corredor Seco de Honduras, Miguel Barreto, director del Programa Mundial de Alimentos ( PMA) para América Latina y el Caribe, pidió ayer una visión a largo plazo ante la falta de lluvias que también incluye Guatemala y El Salvador.

    “Cuatro años de sequía, uno de mayor nivel que otro, han afectado la producción de alimentos, las oportunidades de ingreso y su seguridad alimentaria en términos de deterioro de los niveles de nutrición”, afirmó Barreto.

    La visión de largo plazo debe atender el tema de la asistencia alimentaria y trabajar, al mismo tiempo, en esquemas de promoción de desarrollo para que los habitantes puedan prevenir, responder y recuperarse de estos desastres que los afectan cada cierto tiempo.

    El directivo destacó que el gobierno de Honduras ya cuenta con esta visión estratégica para hacer frente al problema del Corredor Seco.

    En la actualidad, los recursos de la cooperación internacional “son cada vez menos para los países en desarrollo” y por eso se debe insistir en la responsabilidad de los Estados y en un enfoque de largo plazo, advirtió.

    Apoyo

    En el caso del PMA, se trabaja con la Unión Europea para aplicar esquemas de largo aliento que permitan involucrar a unos 25,000 productores en programas que les permitan cambiar sus hábitos de cultivo para volverlos resistentes a la sequía.

    Barreto apuntó que el PMA ha apoyado durante los últimos tres años a casi un millón de personas por año en los tres países para complementar los esfuerzos de los gobiernos para combatir los efectos de la sequía.

    En diciembre de 2016, en las tres naciones habían 2.8 millones de personas en situación de inseguridad alimentaria, una cifra que puede aumentar en la medida en que se vea afectada la cosecha que sale en agosto-septiembre.

    El gobierno hondureño ya puso una serie de medidas para prevenir la inseguridad alimentaria.

    Una de las acciones que hace un par de años se vienen realizando es la liberación de semillas resistentes a la sequía.

    Asimismo, este año si las lluvias no permiten la siembra de maíz se cambiará al cultivo de frijoles. También, se contempla la entrega de recursos en aquellas zonas donde haya mejores condiciones de lluvias para obtener mejores resultados en las cosechas de granos.

    Jacobo Paz Bodden, ministro de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), instó a los productores a que estén pendientes de los reporte de clima para evitar pérdidas en las siembras.