Apocalípticas imágenes de la zona de desastre en Valencia en medio de la búsqueda de desaparecidos

“No hay más terror que este”, ha afirmado desde la “zona cero” de las inundaciones en España uno de los bomberos voluntarios que trabaja en las tareas de rescate en la región devastada por las catastróficas inundaciones donde se ha reportado la muerte de al menos 140 personas.

Las tareas de rescate continúan este jueves en Valencia, la zona más castigada por el impacto de las lluvias y las inundaciones y donde se ha registrado el mayor número de víctimas.

Esta mañana se conoció que habían encontrado trece personas muertas en las pedanías de La Torre y Castellar de la ciudad de Valencia, de las que ocho han sido encontradas en un garaje, según explicó la alcaldesa, María José Catalá.

Agentes de la Guardia Civil ayudan en la recuperación de los cuerpos para trasladarlos a morgues a la espera de que sean identificados.

Según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología, las lluvias torrenciales de las últimas horas comienzan a perder intensidad y extensión, aunque todavía este jueves doce provincias continúan en alerta y especialmente Tarragona y Castellón, con nivel naranja riesgo importante ante acumulaciones cercanas a 40 litros en una hora o 100 litros en 12 horas.

Las lluvias torrenciales siguen en la jornada de este jueves en algunos puntos de Castellón y Tarragona, en el noreste, así como en algunas zonas de Andalucía.

Desde las trombas de lluvia del pasado martes, la Guardia Civil ha realizado 3.400 rescates en las zonas afectadas en la provincia de Valencia y se calcula que unas 300 personas aún están aisladas y un número no determinado en paradero desconocido.

El agua y los alimentos son una de las mayores preocupaciones de las personas afectadas por el temporal.

Vecinos se reúnen en las calles para compartir alimentos tras la devastación causada por las inundaciones.

Un hombre observa la desolación en su comunidad tras el paso de la DANA.

Cataluña (noreste), muy castigada también por la dana, sigue con alerta naranja en el prelitoral y en el litoral sur de la provincia de Tarragona; en el resto de la comunidad, salvo Lérida, el aviso es amarillo (riesgo para ciertas actividades por acumulaciones entre 30 y 20 litros en una hora y por tormentas.

Las autoridades de Valencia enviaron mensajes a través de los teléfonos móviles para informar de forma preventiva a los ciudadanos de que no se desplacen.

“Ha sido una catástrofe, desde las once de la noche estábamos pendientes de poder salir de casa. El agua estaba a un palmo y nos planteamos sacar los coches pero el agua ya venía muy fuerte, en tres minutos subió a metro y medio y si me llego a meter en el garaje no lo cuento”, relata uno de los residentes de la zona, y recuerda que un vecino suyo intentó sacar el coche y está muerto.

“Hoy nos hemos quedado en Valencia porque nos hemos quedado sin batería pero nos volvemos porque aquello es una ciudad sin ley y me niego a abandonar mi casa. Los niños se quedan aquí, vamos a comprar agua y pan y nos volvemos antes de que anochezca”, agregó.

Aún no hay un balance oficial de los daños económicos que se cree serán por varios millones de euros.

Más de 150 carreteras, la mayoría de la red secundaria, permanecen afectadas por las consecuencias de la peor dana del siglo, especialmente en la Comunidad Valenciana, Andalucía y Castilla-La Mancha, con cortes en las autovías A-3 y A-7, por lo que la Dirección General de Tráfico (DGT) recomienda no circular por ellas.