Los Ángeles en llamas: Las impresionantes imágenes de los incendios forestales

Al menos dos civiles murieron en uno de los cuatro incendios que asola a Los Ángeles y que avanzan sin control, impulsados por una tormenta de viento de hasta 160 km/h, informaron este miércoles las autoridades.

Un tercer foco agravó este miércoles la situación de los incendios que mantienen en estado de emergencia a parte de Los Ángeles, con 30.000 personas evacuadas y miles de bomberos movilizados.

A los fuegos declarados el martes en Pacific Palisades y en Eaton Canyon, que ya han consumido cerca de 4.000 acres (más de 1.500 hectáreas), se sumó en las últimas horas un tercer incendio en Hurst, que ha afectado hasta el momento a 500 acres (unas 200 hectáreas), según fuentes oficiales.

El gobernador de California, Gavin Newsom, señaló en un mensaje en la red social X que llega ayuda desde otros puntos del estado para combatir los tres focos.

El último foco, en Hurst, “se propaga rápidamente con fuertes vientos, creando condiciones peligrosas para las comunidades cercanas”, según la información más reciente del Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California, que explicó que los fuertes vientos y la baja humedad contribuyen al “comportamiento agresivo” del fuego.

El origen de los tres focos está bajo investigación y la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, declaró en la tarde del martes el estado de emergencia.

El incendio de Eaton Canyon, al norte de Los Ángeles, obligó a cerrar cuatro campus escolares de Malibú, al igual que el Distrito Escolar Unificado de Pasadena.

El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, en inglés) advirtió el lunes que el sur de California se vería afectado en los próximos días por una tormenta de viento que afectaría principalmente los condados de Los Ángeles y Ventura.

“Los fuertes vientos y la baja humedad relativa producirán condiciones climáticas críticas y extremadamente críticas en el sur de California hasta el jueves”, reza un aviso en la página web del NWS.

Los incendios se han desatado debido a una mezcla de condiciones de sequedad y vientos fuertes, los cuales probablemente se intensificarán.

A Pacific Palisades se han desplazado varios decenas de unidades de bomberos, se han desplegados medios aéreos y hasta bulldozers para despejar un gran número de vehículos dejados atrás por los residentes en esta apresurada evacuación.

“La ciudad de Pasadena está evaluando sin declarar el estado de emergencia debido a los impactos del clima”, dijo el distrito en un comunicado obtenido por NBC.

Aún no se ha informado de heridos ni de víctimas mortales en el incendio de Palisades, pero el gobierno federal y el presidente estadounidense, Joe Biden, siguen de cerca incendio por la posibilidad de que siga creciendo en los márgenes de un condado en el que viven casi 10 millones de personas a gran velocidad.

Bomberos de otros estados se dirigen a California para ayudar a combatir las llamas.