Said Lobo: ¿Qué ha ocurrido un año después del crimen?

La zona viva de Tegucigalpa se pintó de sangre y luto durante la madrugada del 14 de julio de 2022, cuando un comando de sicarios irrumpió en un centro nocturno, engañó e interceptó a cuatro jóvenes que viajaban en una camioneta y, tras ordenarles colocarse contra una pared, los acribillaron.

Entre las cuatro víctimas, estaba uno de los hijos del expresidente de Honduras Porfirio Lobo Sosa, Saíd Lobo. Las autoridades de Honduras dijeron en aquel momento que había sido un ataque dirigido y ejecutado por miembros de pandillas.

Lobo murió junto a Salomón Vásquez, Luis Zelaya y Norlan Rivera Rodríguez. Las víctimas salían a eso de las 2:00 am de una discoteca en el bulevar Morazán. En un video captado por las cámaras de seguridad del lugar se observaba cómo los hombres bajaron al conductor y a Saíd, los acompañantes salieron a reclamar a los sicarios y fueron puestos contra la pared a punta de pistolas. Ejecutaron a Lobo (23), Luis Zelaya (23) y Norlan Rivera Rodríguez (33). Por último a Salomón Vásquez (27) le pegaron en la cara y luego le dispararon. Los hombres salieron en carrera, pero uno de ellos fue herido por la seguridad de los hijos del exmandatario.

Dos de los implicados en el cuádruple crimen son Erick David Macías y Ever Ezequiel Espinoza Martínez, acusados por el Ministerio Público por suponerlos responsables de los delitos de asesinato y asociación para delinquir, detenidos el mismo mes del crimen.

Ayer, en Siguatepeque, Comayagua, la policía capturó a un supuesto cuarto implicado en la masacre. Se trata de un supuesto mimebro de Mara Salvatrucha (MS-13).

Daniel Almendares Ordóñez tenía orden de captura y es un miembro de la organización criminal conocida como los "Compás de la MS", informó la Secretaría de Seguridad, previo a presentarlo. Hoy se informó que el hombre fue enviado a la cárcel El Pozo con medidas de detención judicial.

Este miércoles (23 de agosto de 2023), el secretario de Seguridad, Gustavo Sánchez, dio detalles sobre la captura y remarcó que cuatro personas, hasta este momento, han sido procesadas por el múltiple crimen. Dijo que los cuatro detenidos (incluida una mujer) eran objetivo de indagaciones de los equipos investigativos y que, además, sospechan que dos hombres más están vinculados y estarían siendo ubicados para ser capturados.

Sánchez también declaró que la Policía Nacional cree que un séptimo hombre que participó en la masacre murió a causa de heridas que recibió en la escena.

Por el crimen de los cuatro jóvenes están detenidos Erick David Macías, Ever Ezequiel Espinoza y Norma Alicia García.

Norma Alicia García fue vinculada con el crimen por presunta participación en delitos de asesinato y asociación para delinquir a título de cómplice.

Unos meses después, Rosa Elena Bonilla, madre de Saíd, recordó con lágrimas en los ojos algunos momentos que vivió con su hijo, quien supuestamente la visitaba dos días a la semana. “Pasamos bastante comunicación por teléfono, era muy apegado a mí, pasaba muy pendiente de mí. Este dolor no se compara con nada”, dijo.

“Nunca hemos sido una familia que afectamos a alguien, nos arruinaron la vida. Mi hijo era un muchacho con mucho futuro, era la alegría y entusiasmo, un hombre próspero. Hoy está en los brazos de Dios”, agregó Rosa Elena de Lobo.

Este miércoles, Porfirio Lobo Sosa reaccionó a la detención del cuarto implicado y pidió justicia a las autoridades hondureñas. “No tengo la menor duda que van a recibir el castigo que se merecen”, dijo. .El episodio, que duró solamente 106 segundos, fue una operación relámpago y, según analistas, fue ejecutado por personas con entrenamiento. Un video de las cámaras de seguridad del edificio torre Morazán, en donde está ubicada la discoteca, mostró cómo segundos después de las 2:00 am unos hombres armados (que iban en un “pick up” color negro y marca Toyota Hilux) interceptan a los jóvenes en la salida del recinto.

Las víctimas, así como sus amigos sobrevivientes, habían estado en una discoteca desde las 8:00 pm del miércoles hasta las 2:00 am de ayer debido a que la alcaldía capitalina establece esa hora como el límite para los negocios de operan en horario nocturno. Hasta antes de la matanza todo estaba en una aparente tranquilidad: un grupo de personas estaban sentadas en una gradas del edificio ubicado en el bulevar Morazán, mientras otros platicaban afuera de sus automóviles. Saíd Lobo Bonilla se subió a su camioneta color negra, marca Lexus, junto con su guardaespaldas Norlan Rivera.

El resto de sus amigos iban atrás de ellos en un “pick up”, abordado por Luis Zelaya, en compañía de otras cuatro personas: dos hombres y dos mujeres. Más atrás estaba un tercer automóvil, en el que se conducía José Vásquez. Justamente, a las 2 horas, 0 minutos con 30 segundos de la madrugada, el “pick up” en el que iban los asesinos avanzó (en su paso le arrancó el bómper delantero a otro vehículo) al menos cinco metros hasta cruzar en diagonal para impedir la salida del estacionamiento. Seis hombres descendieron del automóvil y uno quedó a bordo a la espera de que sus compinches regresaran tras ejecutar la operación.

Frente a ellos quedaron las víctimas.Así que cuando los jóvenes estaban a punto de salir, frente a la ventanilla de pago del estacionamiento, los encapuchados lo bajaron a Lobo Bonilla y a su acompañante, Norlan. Posteriormente hicieron lo mismo con Luis Zelaya y José Vásquez y los pusieron contra la pared, apuntándoles. No se ve cuando les disparan.Los seis sicarios se dan a la fuga segundos más tarde, pero uno de los pistoleros cae herido y un compinche lo auxilia para llevárselo, según se registra a las 2 horas, 1 minuto y 55 segundos.