Aficionados del Manchester City y Chelsea protagonizaron lamentables incidentes en Portugal en la previa de la final de Champions League. Fotos AFP y EFE.
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Seguidores de ambos clubes se han desplazado a Oporto para apoyar a sus respectivos equipos y han protagonizado lamentables incidentes en las calles.
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Al menos un herido leve es el saldo de los enfrentamientos registrados en las últimas horas entre aficionados ingleses que han acudido a la ciudad lusa de Oporto.
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Los incidentes se produjeron tras el cierre de bares y restaurantes en las calles de Oporto, Portugal.
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Desacatando las recomendaciones por la pandemia, seguidores de los clubes ingleses terminaron arrojándose sillas y mesas.
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Un hincha del Chelsea resultó con heridas leves tras involucrarse en una bronca luego del cierre de bares y restaurantes en Oporto.
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Los aviones procedentes de Manchester y Londres van aterrizando en el aeropuerto Sá Carneiro y, una vez allí, los seguidores son conducidos en función del equipo al que sigan, con el fin de evitar que se mezclen los hinchas de sendos clubes.
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Las autoridades portuguesas han desplegado un operativo especial para evitar nuevos incidentes entre aficionados ingleses ante la final de la Champions, que reunirá el sábado a más de 12.000 espectadores en el estadio Do Dragão.
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Si el aficionado es el del Manchester City, las fuerzas de seguridad lo conducen hasta la zona de la Alfándega, donde permanecerá hasta que, posteriormente, toda la masa sea orientada hacia el estadio.
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El partido se celebrará con público y en total se ha habilitado para la hinchada inglesa el 33 % de la capacidad del estadio, por lo que la final de la Liga de Campeones será presenciada por 16.500 personas.
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Los agentes de seguridad han tenido bastante trabajo en las calles de Oporto.
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Las mayores complicaciones tuvieron lugar la pasada noche en las zonas de La Ribeira -junto al río Duero-, ya que cientos de seguidores se agolpaban sin distanciamiento, entre cánticos y sin mascarillas. Además del consumo desmesurado de cerveza.