El baile y las diferentes danzas garífunas constituyen una manera peculiar de manifestar los sentimientos de una cultura rica en tradición.
Uno de los grandes exponentes del ritmo caribeño es el ballet internacional folclórico garífuna de Honduras.
Su director, Armando Crisantos Meléndez, informó que el conjunto se ha presentado en escenarios nacionales e internacionales, dando a conocer los bailes garífunas.
Cuando se presentan en teatros, el espectáculo dura alrededor de 45 minutos.
Sentimientos
Son numerosas las danzas conque cuenta la raza negra, una de ellas es “Ofrenda a los ancestros”, baile que forma parte de la religión materna llamada dugú, conformada por una serie de ceremonias y ritos.
Otra manifestación musical es la parranda, canción que habla sobre los problemas de la sociedad, demuestra la amistad, amor y dolor, trata específicamente del estado emocional de quien la interpreta y tiene un papel importante cuando los matrimonios están en problemas. Los instrumentos musicales que incluyen son maracas, guitarras y claves.
Uno de los bailes llamativos es el del máscaro o yankunú, que en lengua garífuna se llama “Uanaruwua”.
Meléndez explicó que se trata de una danza de guerra que representa la lucha de los garífunas contra los ingleses en la isla de San Vicente, en las Antillas menores, en donde los negros utilizaban las máscaras y disfraces para engañarlos y sacar alguna ventaja en las luchas que sostenían.
Las canciones que interpretan hablan sobre problemas sociales.
Los percusionistas suenan con precisión los tambores tras cada movimiento del bailarín, quien frena, salta y hasta se tira al suelo en cuestión de segundos, demostrando su destreza.
La indumentaria
La vestimenta del bailador es colorida, con faldas largas, medias y sonoros caracolitos que se colocan en las rodillas y codos para ser parte del sonido que produce cada movimiento; también lleva camisas de mangas largas, una máscara y en su cabeza una corona con plumas o tiras de papel china.
El baile de entrada casi siempre es a ritmo lento, dando tiempo a que el tamborista comience a medir sus reacciones.
Ceremonia
La danza denominada “Ofrenda a los ancestros” tiene un valor importante dentro de la religión garífuna. En la actuación de los bailarines se puede apreciar una serie de ceremonias y ritos que caracterizan a la raza negra.
Los tambores son parte fundamental en la danza del máscaro. Fotos Omar Galindo