La guapa actriz Emma Watson, famosa por haber interpretado a Hermione en la saga Harry Potter, reconoce que ha aceptado que su cuerpo no es tan perfecto como le gustaría después de años variando de talla -entre 34 y 38- y de haber dejado de lado su deseo de tener una figura lo más recta posible.
“He aceptado mi cuerpo conforme he ido creciendo. Tuve una etapa en la que quería tener un cuerpo recto de arriba abajo, pero yo tengo curvas y caderas y tienes que aceptarte como eres. He tenido entre una 34 y una 38 de talla porque mientras creces tu cuerpo fluctúa y tarda un tiempo en adoptar la forma definitiva”, expresó.
La joven añadió a la entrevista en la revista Glamour: “Me sigo diciendo a mí misma que soy un ser humano, un ser imperfecto que no está hecho para parecerse a una muñeca. Mi personalidad es más importante que tener una buena figura”.