El reloj marcó las 10:10 de la noche, las luces del estadio Olímpico Metropolitano se apagaron por completo y un público eufórico se preparó para recibir entre gritos y aplausos al artista más esperado del año.
Fue así como Marco Antonio Solís salió a iluminar el escenario, luciendo un elegante traje blanco con destellos plateados, su icónico cabello largo, barba canosa, una gran sonrisa y sus ojos expresivos.
“El Buki” encendió el ambiente con sus primeras interpretaciónes “No puedo olvidarla” y “Dios bendiga nuestro amor”.
Posteriormente, dedicó un mensaje de bienvenida: “¡San Pedro Sula, buenas noches!, gracias por el esfuerzo que han hecho de llegar aquí, un honor estar de nuevo en Honduras, sí señor.
Gracias por el apoyo durante tantos años, caray, por eso quiero enviar un abrazo a todos mis contemporáneos cincuentones, y otro abrazo más grande a la juventud romántica”.
Estas palabras desataron la emoción de todos los presentes y el carismático cantautor mexicano nuevamente conquistó los corazones de los hondureños con sus espectaculares canciones llenas de pasión y sentimiento, las cuales fueron coreadas a todo pulmón entre risas, abrazos y fotografías.
“El poeta del siglo” deleitó al público por más de dos horas con su inigualable voz y energía positiva.
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Asimismo, sus cuatro hermosas bailarinas Rachel, Angie, Matilde y Brandy lo acompañaron de principio a fin y cautivaron con sus sensuales movimientos y espectaculares trajes.
Entre los grandes momentos del show, no faltaron los inmortales temas como “Tu cárcel”, “El perdedor”, “Invéntame”, “Acepto mi derrota” y, por supuesto, “Navidad sin ti”.
Esta melodía enloqueció por completo a los sampedranos, quienes entonaron al unísono los tristes versos de la emblemática canción, mientras unos aprovechaban a brindar, otros se fundían en melancólicos abrazos, incluso, muchos no pudieron evitar las lágrimas.
Por último, un cierre con broche de oro al ritmo tropical de “Más que tu amigo”.
Durante esta última interpretación, los verdaderos fans del mexicano no pudieron resistir sus ganas de bailar y dieron rienda suelta a disfrutar el tema que incluye mezclas de cumbia con salsa, muy al estilo latino.
Seguidamente un show de confeti y fuegos artificiales para despedir al gran Marco Antonio Solís.
