El templo Nuestra Señora de Suyapa reunió en una solemne liturgia a los esposos Carlos y Rossana Coello, quienes llevaron a la pila bautismal a su primer heredero Paulo Augusto.
Familiares y amigos de la pareja se unieron a su júbilo para ser testigos de este especial momento en el que Margarita Coello y Luis Fernando Mendieta apadrinaron la vida del nuevo hijo de Dios.
Tras culminar el acto religioso, los selectos invitados se trasladaron hasta la residencia Pozzo Coello, donde se ofreció un brunch en medio de un elegante ambiente adornado con delicados arreglos de rosas y flores primaverales.
Alegría y amenas charlas reinaron en ese especial encuentro en el que se agradeció al Todopoderoso por las bendiciones que ha derramado en la vida de esta joven familia con la llegada de Paulo Augusto.
La reunión continuó hasta el atardecer, en medio de mucho gozo.
