19/06/2025
01:43 PM

Gajitos de temporada

La cantidad de fibra es apreciable y ésta se encuentra sobre todo en la parte blanca entre la pulpa y la corteza, por lo que su consumo favorece el tránsito intestinal.

De su contenido vitamínico sobresale la vitamina C, en menor cantidad que la naranja, el ácido fólico y la provitamina A, más abundante que en cualquier otro cítrico.

También contiene cantidades destacables de ácido cítrico, potasio y magnesio.

En menor proporción se encuentran ciertas vitaminas del grupo B y minerales como el calcio, de peor aprovechamiento que el que procede de los lácteos u otros alimentos que son buena fuente de dicho mineral.

La provitamina A o beta caroteno se transforma en vitamina A en nuestro organismo conforme éste lo necesita.

    La cantidad de fibra es apreciable y ésta se encuentra sobre todo en la parte blanca entre la pulpa y la corteza, por lo que su consumo favorece el tránsito intestinal.

    De su contenido vitamínico sobresale la vitamina C, en menor cantidad que la naranja, el ácido fólico y la provitamina A, más abundante que en cualquier otro cítrico.

    También contiene cantidades destacables de ácido cítrico, potasio y magnesio.

    En menor proporción se encuentran ciertas vitaminas del grupo B y minerales como el calcio, de peor aprovechamiento que el que procede de los lácteos u otros alimentos que son buena fuente de dicho mineral.
    La provitamina A o beta caroteno se transforma en vitamina A en nuestro organismo conforme éste lo necesita.

    Maravillas de la mandarina

    Perteneciente a la familia de los cítricos y de sabor afín al de la naranja, la mandarina es una fruta que puede mezclarse perfectamente casi en cualquier comida.

    Además de ser una fruta nutritiva, nosotros la incluimos en las preparaciones por versátil, ya que sus gajos pueden acompañar una ensalada verde sin problemas, mientras su jugo es un complemento perfecto al momento de crear salsas para carnes rojas, pescados o pollo.

    La mandarina tiene un toque agridulce que puede mezclarse con quesos fuertes, o embonar con el chocolate o caramelo de un postre, esto sin perder sabor ni chocar con los otros ingredientes.
    Para que se mezcle en cualquier platillo el secreto es utilizar el fruto sin que haya madurado por completo, entre más maduro es menos ácido y por lo tanto más dulce y difícil de emplear en platillos salados.

    polos iguales chocan

    Las mandarinas no se emplean con sabores similares porque al hacerlo los sabores pueden saturar el paladar y ninguno se aprecia. Jamás se debe mezclar con quesos ácidos, como el de cabra o el requesón.

    Otro ingrediente o platillo que puede hacer que el cítrico pierda sus características, son los platillos con una degustación neutra, como la pasta, ya que ésta absorbe la acidez y por lo tanto no deja que se aprecie la fruta.
    El jugo, aceite o gajos de la mandarina pueden incluirse en ensaladas, platos fuertes, sopas o postres. Su jugo es primordial para reanimar la flora intestinal y prevenir resfriados y mitiga algunas alergías temporales.