28/03/2024
04:02 PM

La compañía de seguros de Amber Heard solicita una orden para no pagar sus daños a Johnny Depp

En reiteradas ocasiones se ha afirmado que la actriz no tiene solidez suficiente para pagar a su ex esposo

Madrid, España.

Amber Heard fue condenada a pagar a su ex esposo Johnny Depp la cantidad de 10,35 millones de dólares en concepto de daños compensatorios y punitivos después de que un jurado de Virginia dictaminara que le había difamado cuando escribió un artículo en 2018 sobre ser víctima de abuso doméstico, mientras que a ella se le concedieron 2 millones de dólares en concepto de daños compensatorios.

No obstante, la actriz esperaba que su seguro de responsabilidad civil de 1 millón de dólares con New York Marine and General Insurance Co. no tuviera que pagar la factura.

Si bien la póliza cubre varios tipos de conductas ilícitas, incluida la difamación, TMZ señaló que, según la legislación de California, una compañía de seguros no está obligada a pagar si la parte asegurada ha cometido una conducta ilícita y deliberada.

Pero el jurado no sólo consideró que Amber había cometido una difamación deliberada, sino también maliciosa, por lo que New York Marine pretende que el juez declare que, basándose en la póliza y en la ley, no es responsable de pagar los daños a la estrella de ‘Aquaman’.

Amber admitió recientemente que podía entender que la gente los tachara a ella y a su ex marido de “mocosos de Hollywood” por llevar sus diferencias a juicio, pero insistió en que el caso era mucho más que una ex pareja que aireaba sus trapos sucios en público.

“No culparía a las personas por ver esto y cómo se ha cubierto en los medios de comunicación y pensar que se trata de mocosos de Hollywood en su peor momento. Pero lo que la gente no entiende es que en realidad es mucho más grande que eso. No se trata sólo de nuestro derecho a hablar según la Primera Enmienda”.

La estrella de 36 años también dijo que estaba asombrada por el ataque dirigido a ella en las redes sociales y por los fans de Johnny, quienes incluso en las calles aledañas a la sala del tribunal sostenían carteles con amenazas de muerte.

“Cada día pasaba por tres, cuatro, a veces seis calles de la ciudad con carteles que decían ‘Quemen a la bruja’ y ‘Muerte a Amber’.

Después de tres semanas y media subí al estrado y vi una sala llena de fanáticos del Capitán Jack Sparrow que se hacían oír con energía”.