La actriz estadounidense Selma Blair regresará a la gran pantalla para protagonizar ‘Silent’, una película de suspenso sobrenatural dirigido por el dúo de cineastas Doron y Yoav Paz, según informó este jueves Variety.
Producida por Roundtable Entertainment y Templeheart Films, el rodaje de la cinta prevé comenzar este verano en la ciudad canadiense de Vancouver.
Blair interpretará a Skylar, una diseñadora de sonido que es contratada para crear el audio de una película muda. Perturbada por su sonido, se obsesiona cada vez más con su trabajo y, sin darse cuenta, se ve atrapada en un oscuro ritual que desencadena un antiguo mal, detalló la revista especializada.
“Creemos que el mejor horror surge de una construcción de personajes extraordinaria. Por eso Selma es perfecta para esta película” dijeron los hermanos Paz en un comunicado recogido por Variety.
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‘Silent’ marca el regreso de la actriz de ‘Legally Blonde’ (‘Legalmente rubia’; 2001) al cine en un rol protagónico después de que en 2018 revelara que padece esclerosis múltiple.
“Este es un momento triunfal en el notable regreso de Selma a la actuación después de un valiente viaje público a través de la esclerosis múltiple”, agregó por su parte una de las productoras del filme, Sarah Donnelly.
Tres años después de su diagnóstico, la actriz estrenó ‘Introducing, Selma Blair’ un documental en el que ofrece una mirada íntima y cruda sobre su vida mientras se adaptaba a vivir con esclerosis múltiple, enfermedad de la que en 2021 dijo estar en remisión.
Ahí contó que fue diagnosticada en el 2018, pero llevaba muchos años lidiando con los innumerables contratiempos derivados de la enfermedad, antes de que sus médicos pudieran determinar finalmente su dolencia.
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En 2023, ella se sinceró sobre el calvario sufrido en la nueva edición de la edición británica de Vogue, revelando incluso que trató de quitarse la vida en varias ocasiones fruto de la desesperación.
El dolor y entumecimiento de sus extremidades, sin olvidar los espasmos y la fatiga resultante, hicieron que sus experiencias en los sets de rodaje se volvieran insoportables.
A eso hay que sumar el miedo y la incertidumbre de no saber exactamente qué padecía, lo que llevó a la intérprete de 50 años, madre de un niño de once años llamado Arthur, a recurrir ocasionalmente al alcohol y a fuertes tranquilizantes para amortiguar el efecto de la angustia y ansiedad que padecía.
“El agotamiento y la ansiedad se convirtieron en algo aterrador, la verdad. Cometí errores. Deseé estar muerta e intenté suicidarme varias veces. Todo ello como respuesta a la desesperación”, confesó.
