No hay gesto más agradable en el rostro de un niño que una sonrisa, pero para muchos no es tan fácil, pues sufren una afección congénita llamada labio o paladar hendido.
Bajo el principio de “ningún niño en ninguna comunidad tiene porqué vivir con una deformidad corregible”, Operación Sonrisa inició labores en Honduras en 1997 y desde entonces ha incrementado el número de voluntarios que ayudan a que cientos de infantes puedan sonreír sin temor.
Tegucigalpa, Santa Rosa de Copán, Puerto Cortés, Danlí y Choluteca son lugares donde se han organizado misiones locales.
Proyecto
Operación Sonrisa pretendía desarrollar en esta ciudad el proyecto “Metros por sonrisas”, del 14 al 16 de julio, pero su directora, Giannina Guell, informó que suspendieron la actividad “por falta de apoyo de parte de las instituciones. Esperamos realizarla en el futuro, cuando tengamos más colaboradores y la empresa privada nos brinde su ayuda”.
La fuerza de esta misión se basa en el voluntariado, no sólo de médicos y empresarios, sino también de personas encargadas de la logística.
“No recibimos la respuesta que esperábamos, pero quizá en San Pedro Sula la gente necesita saber más sobre Operación Sonrisa y lo importante que ha sido su labor para cientos de niños”, dice Guell.
En gráfica..
Esta iniciativa se pretendía llevar a cabo en Mall Multiplaza.
Avance
Los fondos se destinan a la clínica de Operación Sonrisa que en febrero pasado se inauguró en Tegucigalpa y ahora pasó a la segunda etapa, la instalación de dos quirófanos cuyo costo asciende a cuatro millones de lempiras.
Si desea contactar a esta organización llame al 236- 9311, 236- 9372 o 995- 7699. También puede escribir a gguell@hotmail.com.
El doctor Óscar Sarmiento, un voluntario de Operación Sonrisa, con un paciente.
Si la cirugía se hiciera en una clínica privada, el costo sería de unos L 40 a 50 mil.
En promedio, los niños necesitan 2 o 3 intervenciones quirúrgicas, dependiendo del caso.
