El thriller carcelario 'Celda 211' del director Daniel Monzón ganó este domingo el premio Goya a la mejor película de 2009 en la XXIV edición de os galardones anuales del cine español, entregados en el Palacio Muncipal de Congresos de Madrid.
La película se impuso en las votaciones de los académicos españoles a 'Agora' de Alejandro Amenábar, 'El Baile de la Victoria' de Fernando Trueba y 'El secreto de sus ojos' del cineasta argentino Juan José Campanella.
La cinta cumplió las expectativas como una de las favoritas para esta edición de los premios Goya, haciéndose con ocho de los 16 Goyas a los que aspiraba, entre ellos, el de mejor director para Monzón y mejor actor para Luis Tosar.
Basada en la novela homónima de Francisco Pérez Gandul, 'Celda 211'es un duro relato carcelario que se ha convertido en uno de los grandes éxitos del cine español. En su primer fin de semana en los cines, logró recaudar 1,24 millones de euros (1,69 millones de dólares).
La película relata la historia del funcionario de prisiones Juan Oliver, interpretado por el actor argentino Alberto Ammann, ganador del Goya al mejor actor secundario, que en su primer día de trabajo en una cárcel se encontrará con el estallido de un motín.
Tras quedar atrapado en la zona tomada por los presos más peligrosos del penal, encabezados por el temible Malamadre, al que da vida el español Luis Tosar, Oliver tendrá que hacerse pasar por uno de ellos y actuar con astucia para tratar de salir de su situación.
La película, que ha recibido un sinfín de elogios de la crítica, también ha sido galardonada con varios premios, a los que se une ahora el principal galardón que otorga la Academia de las Ciencias y las Artes Cinematográficas de España.
Cruz y Javier Bardem comparten la gala de los Goya
Penélope Cruz brilló el domingo en el clásico desfile de las estrellas previo a la entrega anual de los premios Goya del cine español, a la cual llegó sola y posteriormente se sentó junto al actor español Javier Bardem.
Mucho se ha especulado sobre la presunta relación sentimental de las dos estrellas españolas, que nunca han confirmado. Curiosamente, ambos eligieron el día de San Valentín para dejarse ver juntos públicamente.
Los rigores del invierno aconsejaron situar la alfombra verde, en este caso por cuestiones de patrocinio, en el interior del Palacio de Congresos de Madrid, donde tuvo lugar la ceremonia de la 24ta edición de los Goya. Sólo algunos valientes, pocos debido al frío, se congregaron en el exterior del auditorio para ver de cerca a sus actores favoritos.
Cruz, con un espectacular vestido claro de Versace, se mostró muy ilusionada por su candidatura al Oscar como mejor actriz protagonista gracias a su interpretación en el musical 'Nine'.
'No me lo esperaba', reconoció Cruz, quien el año pasado se llevó tanto el Goya como el Oscar a la mejor actriz de reparto por 'Vicky Cristina Barcelona'.
Al igual que la famosa actriz española, la mayoría de las candidatas a los Goya o invitadas a la gala eligieron vestido largo, con preferencia por el color oscuro. Los hombres apostaron por el clásico traje oscuro o el frac.
Goya Toledo, con un largo vestigo negro del diseñador libanés Eli Saab, deseó toda la suerte del mundo a Cruz, amiga y compañera suya.
'Estoy muy emocionada por ella', confesó.
Otro vestido largo y negro, de Nina Ricci, fue el que lució Maribel Verdú. La actriz española dijo que Hollywood no le seduce, a pesar su participación en 'Tetro', de Francis Ford-Coppola.
'Es que a mí Hollywood no me llama la atención. Me siento muy cómoda aquí y en mercados como el de América Latina', explicó.
Uno de los más nerviosos de la velada fue el presidente de la Academia de cine, el director Alex de la Iglesia, que estrenaba cargo vestido con un elegante frac.
'Quiero elevar la moral de este negocio. Es importante que la gente disfrute con nosotros', señaló De la Iglesia al referirse a la crisis económica y la recesión por la que atraviesa España, que también afecta al cine.
Pero además de las presencias, también se notaron las ausencias. Pedro Almodóvar, quien mantiene discrepancias con la Academia española desde hace años, volvió a faltar a la cita.
Tampoco pudieron estar presentes la británica Rachel Weisz ni el argentino Ricardo Darín, quien se encuentra actuando en Buenos Aires en una obra de teatro.
Sin embargo, sobre la alfombra verde se pudo ver al actor chileno Benjamín Vicuña, acompañado de su pareja, la modelo argentina Carolina 'Pampita' Ardohain, con un vestido estampado de Carolina Herrera.
Pero ahí no se acabaron las sorpresas. Hasta un perro lució delante de las decenas de cámaras y periodistas acreditados. Se trata de 'Pancho', un can que protagoniza unos anuncios de televisión de la lotería nacional, que este año se sumó como patrocinador de los Goya.