Entre la fenomenología de internet, una de las situaciones más curiosas es lo que se conoce como 'efecto Streisand'. Básicamente todo empezó en 2003, cuando Barbra Streisand pidió que se eliminase una foto de una mansión suya junto a la playa, lo cual tuvo el efecto contrario y provocó un aumento exponencial en la difusión y reproducción de la imagen. Algo parecido sucedió después con la imagen de las hijas de Zapatero. Ahora, la última perjudicada es Beyoncé.
La cantante, estrella de la actuación musical en el intermedio de la Superbowl, fue retratada en su ejercicio físico-cantor por las cámaras de las agencias. Algunas de las instantáneas mostraban a la ex Destiny's Child con gestos de esfuerzo y tensión poco favorecedores.
El portal BuzzFed publicó una serie de fotos poco favorecidas de la cantante, las cuales su representante, para cuidar la imagen de la estrella, pidió que no se hicieran publicas, pero poco caso le hicieron e inmediatamente al momento de darlas a conocer, ya miles de curiosos las estaban viendo.
Sin embargo, la misiva ha tenido el efecto contrario, como demuestra la proliferación de montajes fotográficos y 'memes' con las imágenes de la cantante, algunas de las cuales la muestran como Hulka o levantadora de peso.
