10/12/2025
01:03 PM

Apabullante y arrolladora

Películas como “Miss Sadie Thompson” y “Salomé” mostraron al mundo a una de las mujeres más hermosas y sexys de todos los tiempos: Rita Hayworth. En esa misma época, Betty Grable era el sueño de miles de soldados estadounidenses.

Películas como “Miss Sadie Thompson” y “Salomé” mostraron al mundo a una de las mujeres más hermosas y sexys de todos los tiempos: Rita Hayworth. En esa misma época, Betty Grable era el sueño de miles de soldados estadounidenses.

Con el paso del tiempo, mujeres como Ava Gardner, Brigitte Bardot, Elizabeth Taylor, Marilyn Monroe, Raquel Welch, Catherine Deneuve, Kim Basinger, Jessica Lange, Sharon Stone y, más recientemente, Angelina Jolie, se han inscrito en la historia del cine como las más sensuales.

En el mundo del modelaje, las curvas de Laetitia Casta y Heidi Klum han imperado en las pasarelas; la personalidad y el estilo de Adriana Lima, Gisele Bündchen y Alessandra Ambrosio han traspasado fronteras y el porte y la experiencia de Naomi Campbell, Cindy Crawford o Linda Evangelista no tienen igual.

No todas, por muy hermosas que sean, pueden ser calificadas como mujeres sexys, pues este vocablo inglés involucra muchas cualidades, no sólo la belleza física, aunque ésta sea importante.

Según la definición de la Real Academia Española, la palabra significa: “Que tiene atractivo físico y sexual”.

Más que belleza

Una persona sexy es apabullante e impresiona a los demás con su atractivo, tal como lo haría una potente locomotora, de ahí la expresión coloquial “está como tren”.

Las mujeres sexys, entonces, son guapas, desinhibidas, seguras de sí mismas, coquetas, educadas e inteligentes, justo las características que buscaría la mayoría de los hombres, en su sano juicio, en una pareja.

Es decir, para el sex appeal no sólo la belleza externa cuenta, sino que se deben combinar ciertos factores y cualidades.

Durante la década de los 70, la de la liberación femenina, comenzó a hablarse de la mujer sensual y atrevida, que no temía hablar de sus necesidades emocionales y sexuales; además, de aquella en camino de independencia económica.

Tips para conseguirlo

Aunque no hay escuela facultada en el mundo para entrenar sobre el “arte” de ser sexy, sí se pueden marcar ciertos puntos para llegar a serlo que nunca pasan inadvertidos a los ojos masculinos.

1. Usar ropa interior seductora. Aunque muchos hombres no son capaces de reconocer el estilo de una mujer en cuanto a la moda, todo lo que se relacione con lencería seguro les encanta y saben apreciar un encantador liguero, una tanga coqueta o un sostén de encaje que deje al descubierto un poco de piel.

Esta “belleza interior” es una poderosa arma para dejarlos sin aliento.

2. Tener garbo al caminar. Desde luego que hay una enorme diferencia entre aquéllas que caminan encorvadas, inseguras, arrastrando los pies, contra quienes no bajan la mirada, dan pasos firmes y contonean las caderas, pero no como “licuadora”, sino con gracia y estilo.

3. Ser seguras de sí mismas. Ningún hombre, mentalmente sano, encontraría atractiva a una mujer que no tome sus propias decisiones, que no sepa pedir lo que necesita, corta de conversación e incapaz de afrontar retos personales y profesionales. ¡La inteligencia sí cuenta!

4. No olvidar la femineidad. Los caballeros valoran todos los gestos que son exclusivamente de la mujer: las manos bonitas, con uñas arregladas, las piernas perfectamente depiladas, los pies delicados, el cabello limpio y bien arreglado, no necesariamente con el “peinadazo de salón”, sino bien cepillado y en su lugar, la espalda y los hombros humectados y las axilas sin vellosidad.

Para no olvidar

No olvidar sonreír:

Ser alegre en la vida es maravilloso y sexy. Es más atractiva una mujer con una sonrisa en los labios que una con cara larga, siempre y cuando no sea exagerada.

Ser carismáticas:

El carisma es esa capacidad de algunas personas para atraer o fascinar. Es muy difícil de desarrollar, pues requiere estudiar, ir al cine y no tener miedo.