28/03/2024
07:06 PM

'El coronavirus no es un juego, yo lo viví en carne propia': hondureño en Estados Unidos

El día que llegó a pensar que se iba a morir por el coronavirus llamó a sus hijas para decirle que las amaba.

Nueva York, Estados Unidos

Emilson Díaz, un hondureño que afortunadamente logró sobrevivir al coronavirus después de pasar más de 14 días convaleciente en casa, cuenta que llegó a pensar que se moriría y hasta llamó a sus hijas para despedirse.

'Hubo unos días que pensé que me iba a morir, caminaba unos pasos y me cansaba, me faltaba la respiración. Después me empezó a dar una tos seca, tosía una vez y no podía parar, me faltaba el aire', señaló el hondureño residente en Nueva York.

'Un día le llamé a mis hijas y les dije: okey​​ hijas las quiero, las amo', contó Emilson en una entrevista a Diario LA PRENSA.

Nueva York
es el gran epicentro de la pandemia en Estados Unidos, con más de 320,000 de los 1.1 millones de casos positivos en el país, y 26,000 de las casi 70,000 muertes a nivel nacional.
'Yo fui al hospital y me dijeron: tú puedes respirar todavía, no te podemos atender, no te podemos tener aquí en el hospital. Regresé a casa y me dijeron que tomara cosas calientes y Tylenol', comentó el joven originario de Tocoa, Colón, y quien hace 18 años reside en Estados Unidos.

Su pesadilla con el coronavirus comenzó cuando 'acababa de regresar de Honduras en febrero, trabajé una semana, a la siguiente empecé a sentirme mal, tenía dolor de cabeza, calentura leve, como el viernes me comenzó la fiebre alta, dolor de cabeza, ya no podía oler ni sentir el sabor a las cosas', dijo.

'Después vinieron los días más críticos, me dieron fiebres altísimas, solo sentía que mi cara iba a explotar. Yo tomaba pastillas cada cuatro horas para cortar la fiebre y el dolor de cabeza, hacía reacción y ahí no más se pasaba; la fiebre seguía otra vez', detalló.

Para el hondureño, lo más difícil 'fue el último día que me dio fiebre, me desperté con aquella fiebre que yo no aguantaba el dolor, sentía que la cabeza me iba a explotar, ahí fue cuando les mandé un mensaje a mis hijas'.
Emilson cuenta que el doctor solo le dijo que había que esperar dos semanas para que pasaran los síntomas. Pero unos días antes de comenzar a sentirse mejor, dice que llamó a una ambulancia y le dijo que si todavía podía respirar que se quedara en casa, que no lo podían llevar. 'Ahí es cuando uno siente que en realidad te vas a morir, que ya no hay vuelta para atrás', expresó.

Emilson Díaz vive en Estados Unidos desde hace 18 años.

El hondureño se mudó por temor de Nueva York a otra ciudad.

Test de coronavirus

'El día que me empezaron las fiebres altas, fui al hospital a hacerme la prueba. Te meten un hisopo de plástico grande en la nariz y te lo restriegan y eso duele muchísimo', expresó.

Después le revisaron los pulmones y lo mandaron para la casa a cuarentena.

'Al día siguiente me mandaron un texto con un link donde decía que era positivo de coronavirus y que tengo que estar 14 días en cuarentena', afirmó.

Cuando se sintió mejor no volvió a hacerse el test de coronavirus, ya que los síntomas habían pasado. 'Después que me pasó la fiebre pasaron como tres días para empezar a oler las cosas, a sentir sabor. He quedado con un poco de cansancio', recordó.

Emilson agradece a su tía que lo cuidó durante la cuarentena.

Cómo se contagió

Emilson Díaz no está seguro si contrajo el virus en su trabajo o en alguna reunión familiar. 'No tengo idea en dónde me contagié, porque el virus está por todos lados', comentó.

'Una prima mía se contagió en el trabajo, ella contagió a la mamá, a la hermana, hermano y a la sobrina. Ella si está segura que contrajo el virus en el trabajo. La verdad que no sé si fue donde ellos que me contagié o fue en el trabajo', indicó.

'Yo hacía chiste, no creía mucho en el coronavirus', comenta ahora para advertir a las demás personas de lo grave que es esta enfermedad.

Continuó: 'Hay mucha gente que no cree y yo les digo que el coronavirus sí existe, se los digo yo que lo viví en carne propia. No es una broma, no es un juego, es algo muy serio que te podes morir'.

Foto: La Prensa

Emilson Díaz trabaja en Nueva York, Estados Unidos.