Tegucigalpa, Honduras.
Diversos sectores productivos e industriales consideran que hay disposiciones en regulaciones municipales y nacionales que se convierten en trabas para la inversión y al final ahuyentan a los inversionistas.
Lo anterior contrasta con la política del Gobierno que postula que una de las rutas para generar fuentes de empleo y estimular el crecimiento económico es la inversión privada.
El presidente Juan Orlando Hernández aprovecha cada foro nacional e internacional para invitar a los empresarios a invertir en el país.
El mandatario destaca en sus intervenciones los avances de Honduras en el último año, especialmente la estabilidad macroeconómica y los logros en seguridad, como uno de los atractivos para venir y hacer negocios.
Sin embargo, la actitud de diferentes estratos burocráticos, que enredan la gestión y los trámites, convierte en un verdadero dolor de cabeza cualquier iniciativa de inversión de capital interno o externo.
No todos los funcionarios del Gobierno corren con el mismo ritmo de la energía que transmite el discurso del Presidente y muchos de ellos dan largas a resoluciones, acuerdos o disposiciones en lugar de acelerar la toma de decisiones cuando se trata de inversión que busca no solo generar empleo, sino fortalecer la economía.
A pesar de que Honduras ha mejorado su posición en las tablas comparativas de países, persisten ciertas instancias en que los trámites todavía son engorrosos para quienes quieren invertir.
Diversos sectores productivos e industriales consideran que hay disposiciones en regulaciones municipales y nacionales que se convierten en trabas para la inversión y al final ahuyentan a los inversionistas.
Lo anterior contrasta con la política del Gobierno que postula que una de las rutas para generar fuentes de empleo y estimular el crecimiento económico es la inversión privada.
El presidente Juan Orlando Hernández aprovecha cada foro nacional e internacional para invitar a los empresarios a invertir en el país.
El mandatario destaca en sus intervenciones los avances de Honduras en el último año, especialmente la estabilidad macroeconómica y los logros en seguridad, como uno de los atractivos para venir y hacer negocios.
Sin embargo, la actitud de diferentes estratos burocráticos, que enredan la gestión y los trámites, convierte en un verdadero dolor de cabeza cualquier iniciativa de inversión de capital interno o externo.
No todos los funcionarios del Gobierno corren con el mismo ritmo de la energía que transmite el discurso del Presidente y muchos de ellos dan largas a resoluciones, acuerdos o disposiciones en lugar de acelerar la toma de decisiones cuando se trata de inversión que busca no solo generar empleo, sino fortalecer la economía.
A pesar de que Honduras ha mejorado su posición en las tablas comparativas de países, persisten ciertas instancias en que los trámites todavía son engorrosos para quienes quieren invertir.