Alden Rivera, embajador de Honduras en México y exministro de Desarrollo Económico, en una entrevista exclusiva con LA PRENSA habló sobre el impulso que dará a la economía nacional el Plan Honduras 20/20, y sobre la importancia de México como socio estratégico.
Muy importante. Es el primer país con el que estamos gestionando el programa Honduras 20/20, tenemos muchas afinidades en los sectores productivos, de tal manera que creemos que tenemos una oportunidad muy grande para impulsar el crecimiento económico.
Bueno. El crecimiento económico de un país es un esfuerzo que requiere de tiempo para poder alcanzar un ritmo mucho más alto. Creo que las acciones tomadas al inicio del gobierno del presidente Juan Orlando Hernández están comenzando a dar resultado. Hoy el país está creciendo 3.7%, es la tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto más alta de Centroamérica junto con Guatemala, y esperamos que el Plan Honduras 20/20 sirva para subir un 1.5% adicional, y poder registrar un crecimiento mayor al 5% para el 2020.
El Programa Honduras 20/20 ha priorizado seis sectores productivos: ensamblaje ligero, textil, servicio de negocios como call center, turismo, vivienda y el sector agrícola, estos sectores es donde vamos a focalizar todos los esfuerzos para crecer, incluso, se ha creado una legislación especial para potenciar esas áreas y crear condiciones para que se vuelvan atractivas para el sector privado nacional y extranjero.
Durante el 2013 y 2014 fue el país que más invirtió en Honduras, y en el año 2015 y para este año 2016 está entre los tres países que más invierte aquí.
Marcha lento, es un proyecto muy grande que requiere pasar por una serie de etapa de estudios. La idea está en estudio de factibilidad, eso lo está haciendo el Gobierno de México. Guatemala, El Salvador y Honduras le están dando seguimiento a los avances porque quieren participar. Esta es una obra compleja en terminos técnicos y tecnológicos. Para el país es muy importante porque vendría a solucionar el problema del costo de la energía eléctrica.
La etapa de construcción, estimamos tardará unos dos o tres años en comenzar. El gasoducto vendrá desde el norte de México, luego pasará por Guatemala y de ahí cruzará a Honduras a través de Puerto Cortés, y en algún punto haría conexión con El Salvador.
Esto le daría una ventaja competitiva a la región. La implementación de este tipo de energía con gas podría significar una reducción de un 30% en el costo de la factura eléctrica, por lo menos para fines industriales. Esto haría mucho más competitiva a la industria nacional.
Requiere una inversión de más de 2,000 millones de dólares, es alta, pero rentable.
Estamos casi culminando todas las etapas de preparación. Antes de que termine el año va a estar operativo. Eso nos da una ventaja competitiva muy importante. Todo el intercambio comercial que se está gestionando con México ya no tendría que pasar por dos fronteras sino solo por una y eso facilita el comercio. Además se puede promocionar al país por el tamaño del mercado, ya que esta es una de las cinco variables que las empresas toman en cuenta antes de poder invertir. En términos de economía representaremos el 42% de todas las exportaciones de Centroamérica.