Bucaramanga, Colombia.
Incentivar a los palmeros a producir de forma sostenible con el ambiente, es el objetivo del 44 Congreso Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite que culmina hoy en Bucaramanga, Colombia.
“Los consumidores son más exigentes y quieren saber bajo qué prácticas se elaboró el producto que están consumiendo. Además de esto, está todo el tema del impacto del cambio climático que afecta a todo el sector agrícola, entre ellos la producción de aceite de palma a nivel nacional y mundial. Es por eso que debemos evolucionar y comenzar a implementar prácticas amigables con el medioambiente”, manifestó Juan Carlos Espinoza, líder ambiental de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite (Fedepalma) de Colombia.
Jens Mesa Dishington, presidente ejecutivo de Fedepalma, manifestó que en este congreso se quiere resaltar la importancia de la productividad y de la asociatividad como pilares para alcanzar la competitividad y sostenibilidad de la agroindustria de la palma de aceite.
“Los compromisos asumidos en los diferentes tratados de libre comercio que ha suscrito el país, y el crecimiento de la producción de los aceites de palma, implican que el futuro de esta agroindustria está en la exportación”, refirió.
Incentivar a los palmeros a producir de forma sostenible con el ambiente, es el objetivo del 44 Congreso Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite que culmina hoy en Bucaramanga, Colombia.
“Los consumidores son más exigentes y quieren saber bajo qué prácticas se elaboró el producto que están consumiendo. Además de esto, está todo el tema del impacto del cambio climático que afecta a todo el sector agrícola, entre ellos la producción de aceite de palma a nivel nacional y mundial. Es por eso que debemos evolucionar y comenzar a implementar prácticas amigables con el medioambiente”, manifestó Juan Carlos Espinoza, líder ambiental de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite (Fedepalma) de Colombia.
| Avances
La Fenapalmah registra ocho plantas procesadoras en el país, las cuales han aplicado a la certificación.
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“Los compromisos asumidos en los diferentes tratados de libre comercio que ha suscrito el país, y el crecimiento de la producción de los aceites de palma, implican que el futuro de esta agroindustria está en la exportación”, refirió.
Mejoras
Colombia es un país referente en producción de aceite de palma en Latinoamérica y a nivel mundial, con una producción de 1.3 millones de toneladas de aceite por año. En la implementación de prácticas ambientales también avanzan. En la actualidad, cuatro empresas de ese país cuentan con la certificación de Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible (RSPO), que garantiza los procesos de producción sostenible con el medio ambiente.
“Los productores deben entender que avanzar en esta área significa ampliar las oportunidades de mercado nacional y extranjero”, manifestó Juan Fernando Lezaca, director de asuntos institucionales de Fedepalma.
