Las constantes pérdidas de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee), que se cuantifican en 4,500 millones de lempiras, seguirán generando presión sobre el déficit del Gobierno central, que sigue hablando de mantener este indicador en un máximo de 4.5%.
Para reducir las pérdidas, la Enee presentó un plan de rescate al Congreso Nacional que contempla un rebalanceo de tarifas que se traducirá en un incremento a la tarifa eléctrica que pagan los hondureños, reformar la fórmula de cálculo del ajuste por combustible, que significaba, también, un alza en la facturación mensual, y una focalización de un subsidio eléctrico que beneficia a 525,000 familias.
También se contempló una severa reducción de personal supernumerario y la renegociación de los contratos suscritos con los generadores térmicos, aunque este último punto fracasó.
A pesar de la presentación de este plan, “no hemos tenido respuesta del Congreso Nacional y se ha optado por tomar otras medidas que reduzcan el porcentaje de pérdidas”, expresó el gerente de la estatal, Emil Hawit.
El funcionario dijo que es difícil que se realicen estas acciones y que han reestructurado el presupuesto de 2012 para operar en el presente año. Además, adelantó que comenzaron a renegociar la colocación de 300 millones de lempiras en bonos transferidos por el gobierno para cancelar un 45% del total de la energía subsidiada.
Menor producción hídrica
Hawit reveló que se redujo en un 40 % el nivel de agua almacenada en la hidroeléctrica El Cajón debido a las altas temperaturas.
Esta situación climática generó que la demanda eléctrica en Honduras se dispare en más de 1,300 megavatios. Sin embargo, aún no se arrancan las plantas térmicas de la Enee situadas en subestacione La Puerta, San Pedro Sula. “Estas y otras plantas producen el kilovatio /hora en 70 centavos de dólar”, refirió el funcionario.
