De las 11 instituciones financieras emisoras de tarjetas de crédito, cinco controlan el 87.7% del mercado hondureño.
Las financieras autorizadas por la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS) realizan fuertes campañas publicitarias, ofreciendo descuentos que van desde el 5 hasta el 20% por compras de productos en establecimientos comerciales.
A lo anterior se suman agresivas estrategias como la movilización de vendedores a los negocios más concurridos en las principales ciudades del país, así como las llamadas telefónicas de los centros de llamadas contratados para ofrecer las tarjetas de crédito.
Todo lo anterior se ha reflejado en un crecimiento en la emisión de tarjetas en el mercado nacional, que en el período 2013-2014 aumentó de 786,959 a 840,768 plásticos, un incremento de 53,809 tarjetas que representan el 6.8%.
Lo antes expuesto cumple las espectativas de la CNBS para el año pasado sobre el crecimiento del mercado de las tarjetas.
Centrales de riesgo. Según la base de datos del CNBS, el 54% de los tarjetahabientes estaba en la central de riesgo. Guillermo Altamirano, analista económico, expone que la liquidez de la banca hondureña permite la colocación de los recursos por medio del servicio de las tarjetas de crédito.
Este medio de pago mantiene su ritmo de crecimiento, que ya abarca aproximadamente el 10% de la población hondureña.