Invertir más en infraestructura y crear un sistema de crédito para los inversionistas son dos puntos claves para el crecimiento económico de Honduras y Centroamérica señalados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en el informe macroeconómico de América Latina y el Caribe La hora del crecimiento.
El crecimiento de la economía mundial será de 3.9% y la proyección para Centroamérica es de 3.0%. La región está creciendo más que el resto de Latinoamérica, proyectada en 2.5%, detalla el documento presentado el miércoles en Tegucigalpa. Esto está siendo beneficiado por el desempeño macroeconómico sostenible y bien manejado, impulsado también por el precio bajo de materias primas, de las cuales Centroamérica es importador.
Otro punto importante es que el desarrollo económico de Estados Unidos está arrastrando a la región debido a que el 50% de sus productos son exportados a ese país norteamericano. Sin embargo, para el BID, el crecimiento de Centroamérica y el resto de Latinoamérica es decepcionante si se compara con la evolución del resto del mundo y teniendo en cuenta el potencial que posee la región.
Osmel Manzano, analista económico del BID, expresó que la región centroamericana necesita crecer más, dado a que la mayoría de la población es todavía joven y se necesita lograr oportunidades para estos mismos jóvenes.
Atraso
La hora de crecimiento señala que las tasas de inversión son más bajas que en otras economías emergentes. El ahorro está limitado por sistemas financieros pequeños e ineficientes que no llegan a todos los ahorradores con instrumentos de ahorro adecuado.
Otro factor a mejorar es que en varios países de la región los ingresos son bajos y las tasas de interés real dan lugar a limitaciones cruciales.
Un factor importante es el atraso que tienen los países centroamericanos en la inversión en términos de gastos destinados a la investigación y desarrollo, lo que causa que los países queden rezagados al momento de adopción de nuevas tecnologías comparada con el resto del mundo. El incremento del precio del petróleo, la crisis migratoria y los asuntos de política comercial.
Inversión
Los países de la región tendrán que invertir de 2 a 2.5% del PIB al año en infraestructura; crear un sistema de crédito viable, debido a que es una de las quejas más frecuentes de los inversionistas; asegurar la estabilidad financiera y macroeconómica es un requisito para un progreso más sostenido hacia mayores fuentes de ingresos; promover reformas fiscales específicas para mejorar la productividad con el fin de sentar las bases para un crecimiento a largo plazo más rápido; priorizar la inversión y aumentar la eficiencia de ese mismo capital para asegurar que el esfuerzo rinda y así lograr que la región crezca rápidamente y sea próspera.