Tegucigalpa, Honduras.
La crisis financiera que golpea a las empresas del Estado obliga a la administración del presidente Juan Orlando Hernández a adoptar medidas radicales de corto y mediano plazo para contener el excesivo gasto en salarios.
La medida busca así evitar el drenaje de recursos de la administración pública para cubrir el desfase fiscal.
El Gobierno central aprobó 36,564.8 millones de lempiras en salarios para 2014, sin embargo, la partida asignada para 2015 es de 35,940.9 millones, equivalente a una reducción de 624.4 millones. En el caso de las instituciones descentralizadas, la masa salarial bajará de 15,772.4 a 15,544.5 millones de lempiras, o sea 227.9 millones menos.
La Enee, Hondutel y la ENP (Empresa Nacional Portuaria) se han caracterizado entre el sector público hondureño como las empresas que mejores salarios pagan a sus funcionarios y empleados, asegurados por los beneficios económicos contemplados en los contratos colectivos de trabajo.
Ese atractivo ubicó a esas empresas entre los objetivos de los gobernantes de turno, diputados y otros funcionarios.
No obstante, Miguel Aguilar, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Enee(Sitraenee), asegura que los mejores salarios en la empresa los devengan personas que no llegan a trabajar, los que generalmente se conocen como “paracaidistas”.
El dirigente agrega que hay un nutrido grupo de personal técnico que devenga buenos salarios, pero que eso se fundamenta en la naturaleza de su trabajo, principalmente de aquellos que se encargan del mantenimiento de las redes eléctricas.
Orlando Mejía, presidente del Sindicato de Trabajadores de (Sitratel), reaccionó a la medida diciendo que emprenderán acciones legales en los tribunales competentes a favor de los 728 empleados suspendidos de sus labores durante 120 días, tiempo en el cual no gozarán de sus salarios.
La crisis financiera que golpea a las empresas del Estado obliga a la administración del presidente Juan Orlando Hernández a adoptar medidas radicales de corto y mediano plazo para contener el excesivo gasto en salarios.
La medida busca así evitar el drenaje de recursos de la administración pública para cubrir el desfase fiscal.
El Gobierno central aprobó 36,564.8 millones de lempiras en salarios para 2014, sin embargo, la partida asignada para 2015 es de 35,940.9 millones, equivalente a una reducción de 624.4 millones. En el caso de las instituciones descentralizadas, la masa salarial bajará de 15,772.4 a 15,544.5 millones de lempiras, o sea 227.9 millones menos.
La Enee, Hondutel y la ENP (Empresa Nacional Portuaria) se han caracterizado entre el sector público hondureño como las empresas que mejores salarios pagan a sus funcionarios y empleados, asegurados por los beneficios económicos contemplados en los contratos colectivos de trabajo.
Ese atractivo ubicó a esas empresas entre los objetivos de los gobernantes de turno, diputados y otros funcionarios.
No obstante, Miguel Aguilar, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Enee(Sitraenee), asegura que los mejores salarios en la empresa los devengan personas que no llegan a trabajar, los que generalmente se conocen como “paracaidistas”.
El dirigente agrega que hay un nutrido grupo de personal técnico que devenga buenos salarios, pero que eso se fundamenta en la naturaleza de su trabajo, principalmente de aquellos que se encargan del mantenimiento de las redes eléctricas.
Orlando Mejía, presidente del Sindicato de Trabajadores de (Sitratel), reaccionó a la medida diciendo que emprenderán acciones legales en los tribunales competentes a favor de los 728 empleados suspendidos de sus labores durante 120 días, tiempo en el cual no gozarán de sus salarios.