Ronaldo Naza-rio, delantero brasileño del Real Madrid, afirmó que está “involucrado en el proyecto” madridista, y repasó su relación con Fabio Capello, admitiendo que es “uno de los técnicos más exigentes” que ha tenido en su carrera.
Ronaldo compareció en rueda de prensa con un tono calmado, tras dormir sólo cuatro horas después de romper en Kiev ante el Dínamo su sequía de dos años sin marcar en Liga de Campeones.
“No juego bien para callar bocas, sino por mi felicidad: la consigo cuando juego y marco goles”, declaró el brasileño.”
No estoy contento sólo por los goles, sino por mi mejoría en mi condición física. Ha sido una época dura de año y medio con lesiones seguidas, una tendinitis crónica antes de la operación y ahora las cosas van bien; estoy involucrado en el proyecto del Real Madrid y quiero seguir siendo importante para el equipo”, dijo.
Discuten
El brasileño habló con respeto hacía Capello, que reconoce sabe sacar lo mejor de él con la exigencia.
“Capello me exige mucho y algunas veces no nos entendemos, discutimos. Me gusta mucho que me exija, que demuestre que está interesado en mi, que soy un jugador importante para él y que confía en mí”.
Afirmó que no le da ninguna importancia a las polémicas sobre su peso.
“Me parece absurdo llevar tanto tiempo hablando de esto (...) Cuando anoto soy grande y cuando no, estoy gordo”.
El internacional brasileño tiene “muchísimas ganas de ayudar al equipo, de ser importante, de marcar goles”, al tiempo que asegura que “intentaré ganar mi apuesta” de marcar 30 goles esta temporada.
Dopaje
Real Madrid, Barcelona, Valencia y Betis desmintieron ayer cualquier relación con el doctor Eufemiano Fuentes y negaron así las informaciones del diario francés “Le Monde”, que relacionaban a dichos clubes con el médico español, sospechoso de ser el instigador de una importante red de dopaje.
Según la información del diario francés Le Monde, el Barcelona, el Real Madrid, el Valencia y el Betis habrían recurrido a los servicios del doctor Eufemiano Fuentes.
”Le Monde” basa esas aseveraciones en “documentos confidenciales” redactados a mano por el propio Fuentes.
