Cuando todos pensaban que su carrera como futbolista profesional había llegado a su final en una edad productiva, Ronald Maradiaga ha sido capaz de levantar la mano y decir: Aquí estoy, listo para seguir dando guerra...
El Cuervo figura en el listado de jugadores que el Victoria presentó ante los registros de la Liga para competir en el nuevo torneo que despega el próximo sábado.
Es decir, que el técnico Jorge Pineda cree y piensa que Maradiaga le puede ser útil en una competencia que se anticipa dura y complicada para todos los equipos.
Hasta poco antes nadie imaginó que el diminuto volante pudiera ser tomado en cuenta para ponerse la camisa blanquiazul, mucho menos que despertara y entusiasmara el apetito futbolístico de los dirigentes.
“Cuervo, Carlos Oliva y Víctor Mena andan volando...”, comentó entusiasmado el dirigente Allan Galindo.
Una historia que contar
Para nadie es un secreto las vivencias tormentosas de este futbolista fuera de la cancha.
Nació y creció en las reservas del Victoria siendo un chaval. Fue inseparable con Walter “Pery” Martínez, con quien debutó en la gran liga a temprana edad.
La parejita se hizo muy popular y les sobraban los amigos que los invitaran a parrandear. Eso marcaría su vida.
Pery reaccionó y se convirtió en un futbolista visionario, hoy celebra sus goles en la Superliga China. El Cuervo tiene una nueva oportunidad para enderezar su camino y parece que esta vez afronta el reto con mentalidad madura.
“Espero hacer mi mejor torneo y para eso he trabajado fuerte, ahora sólo pienso hacerlo bien en la cancha para demostrar que soy otro”.
“La verdad es que yo confío en lo que puedo aportarle al club y agradezco al profesor que me haya tomado en cuenta. Ahora todo depende de mi trabajo y voy a procurar hacerlo de la mejor manera”.
Pineda tiene preferencia por el jugador responsable y cumplidor y Maradiaga lo sabe. “Yo más o menos sé cómo trabaja él -Pineda- y cómo le gusta que uno se desempeña en la cancha. Entonces por ahí ya captamos su idea y si se nos da la oportunidad vamos a intentar responder de la mejor manera”.
Por un puesto titular
El Cuervo compensa su baja estatura con buen dominio y visión de campo, características que lo convierten en un jugador clave para lo que pretende la Jaiba.
En su departamento hay dos o tres jugadores más que podrían orillarlo a la banca. “En la posición que yo juego casi están los mismos, los que han venido son defensas y delanteros. Pero de cualquier manera yo me he preparado bien y estoy listo cuando el profesor requiera mis servicios”.
El jugador no desconoce que el Victoria llega comprometido a este torneo, ya que en los dos últimos ha dejado mucho que desear con un déficit futbolístico muy acentuado.
“Sí, el reto es levantarse y vamos a trabajar duro para lograrlo y darle alegría a toda la afición que nos apoya”.
