La durísima derrota de la Selección Argentina por 6-1 ante España significó una gran preocupación a 77 días del Mundial de Rusia 2018. La aplastante goleada dejó un grupo golpeado por la gran diferencia que dejó el juego y el resultado final.
Por este motivo, Lionel Messi vio golpeados a sus compañeros y decidió bajar rápido al vestuario, incluso antes de que finalice el encuentro, para brindarle su apoyo tras la inesperada goleada en contra.
'Levanten la cabeza. Esto lo vamos a sacar adelante juntos', arengó el crack, quien no pudo jugar ninguno de los amistosos de la fecha FIFA, pero pone todas sus fichas a levantar la copa en Rusia 2018, el que será su cuarto Mundial. Líder dentro y fuera.
Sus palabras fueron muy bien recepcionadas por el resto del grupo, que sabe que tiene al as de espadas absolutamente comprometido a 77 días del comienzo del torneo.