Era inevitable preguntarle a Reinaldo Rueda cuál era la diferencia de la actual Honduras a la que clasificó y dirigió en el último mundial; pero el colombiano dijo: “Las comparaciones no caben”.
El actual entrenador de Ecuador habló después del triunfo 5-4 en penales de los suramericanos sobre los catrachos. “Son diferentes, a pesar de que casi todos los jugadores que estuvieron en la cancha trabajamos con ellos”, agregó.
Considera Rueda que la Selección Nacional “está por buen camino, haciendo buen juego, mostrando la experiencia conseguida durante el Mundial. Lo de la Copa Uncaf dio valorarización de algunos jóvenes de gran futuro”.
Para el ex seleccionador catracho, el partido “fue lindo, sabíamos la calidad de rival que enfrentábamos, Ecuador hizo un juego inteligente, sobre todo porque Honduras comenzó con el marcador a su favor. El partido se dio equilibrado al final”.
Admitió que no es fácil en 48 horas enfrentar a un rival en una plaza difícil como la ceibeña, el clima, desgaste, humedad tienen que tomarse en cuenta a la hora de analizar.
Calificó el juego de atractivo “y por momento emotivo para las dos Selecciones”.
Recomendó “un poco más de cariño” hacia la cancha al ser una de las mejores del país, “estaba un poco dura, en ciertos tramos afectó, le dio un bote al arquero en el gol de Honduras y Jerry (Bengtson) que fue oportuno”.
Rueda hizo énfasis en que el duelo del pasado miércoles significaba el reencuentro de jugadores que estuvieron con él en Sudáfrica. No se reunían desde hace ocho meses, “los otros que ganaron la Copa Uncaf tenían una motivación extra”.
Para el hondureño naturalizado existe futuro en nuestra representación “que se tiene por lo realizado en los últimos años y por esa raza futbolera que caracteriza a esta tierra.
Lo del Mundial de Corea Sub 17, el de Nigeria, se van dando esa satisfacción, me es grato ver a Johnny Leverón y Johnny Palacios”, concluyó.
El seleccionador ecuatoriano siempre tuvo un ambiente agradable en su estancia en el país para el referido amistoso internacional.
