Foxborough, Estados Unidos. La Copa América Centenario 2016 en Estados Unidos se ha manchado con una tremenda polémica que pasará a la historia del fútbol mundial.
Y es que durante el partido de fase de grupos entre Brasil y Perú en el estadio Gillette, el delantero inca Raúl Ruidíaz marcó un gol con la mano, y pese a la revisión del árbitro, subió al marcador para la alegría de los peruanos y amargura de los brasileños.
El sílbante uruguayo Andrés Cunha consultó con su asistente la controversial jugada. Luego de la protesta de los futbolistas brasileños pidiendo sancionar la mano de Ruidíaz y el intento fallido de los árbitros por utlizar el video para ver la repetición, Cunha corrió hacía el medio y sancionó el gol que decretó la clasificación del conjunto de Ricardo Gareca a los cuartos de final.