El partido amistoso entre Honduras e Inglaterra que se juega hoy en Miami, Estados Unidos, ha sido interrumpido al minuto 30 por amenaza de una tormenta eléctrica.
Durante el primer tiempo, el árbitro central sonó su pito y llamó a los capitanes de los equipos y al cuerpo técnico de ambos equipos para comunicarles la suspensión temporal del encuentro, cuyo marcador era de 0-0.
El árbitro estadounidense, Ricardo Salazar, decidió dar un tiempo de media hora para continuar el encuentro que está empatado sin goles en el Estadio Sun Life, de Miami.
Los jugadores de los dos equipos regresaron a los camerinos del estadio desde que Salazar interrumpió el partido.
Aunque cientos de hondureños llegaron hasta el Sun Life Stadium de Miami, Estados Unidos, para presenciar el partido amistodo, la emoción se frenó cuando de manera sorpresiva se suspendió; sin embargo, poco después la alegría y los gritos de los aficionados volvieron a escucharse en el Sun Life Stadium.