Zinedine Zidane colocó hoy a Francia en su segunda final de un Mundial con un gol de penalti, que cometió el portugués Ricardo Carvalho sobre Thierry Henry en el minuto 32.
Zidane, que ganó su primera Copa del Mundo en 1998, lanzó el penalti de forma ajustada al palo derecho de Ricardo, que adivinó la dirección pero no llegó en su estirada a tocar el balón.
“Zizou” dirigió a Francia con la misma imagen que figuraba en una pancarta colgada por unos aficiones galos en los graderíos: un maestro de orquesta con batuta.
Recién cumplidos los 34 años, “Zizou” ha anunciado que después del Mundial colgará las botas, pero sus últimas actuaciones ante España, Brasil y Portugal multiplican las voces que piden que no se retire.
El “maestro” manejó la pelota con su mimo habitual y bajó a defender cuando fue necesario, sobre todo en los saques de esquina.
Zidane aspira el próximo domingo en Berlín a conquistar su segundo título mundial y el segundo de Francia, en la final contra Italia, que el martes eliminó a Alemania.
El Estadio Olímpico de Berlín acogerá una final inédita en la historia de los mundiales, mientras en la víspera en Stuttgart Alemania y Portugal lucharán por el simbólico tercer puesto.
Además de su gol, ‘Zizou’ fue, como ya lo había sido ante Brasil, el catalizador por donde pasa todo el fútbol de la selección francesa, imponiendo su ritmo, o haciendo la pausa cuando el partido lo demanda, y sorprendiendo a todos con pases milimétricos.
En el primer tiempo, Zidane literalmente agotó a su compañero Frank Ribéry con muchos lanzamientos en profundidad, que invariablemente encontraron desarmada a la zaga portuguesa y llevaron peligro.
Ya en el segundo tiempo, cuando ya estaba él mismo cansado, Zidane retrocedió en el terreno y se convirtió en la válvula de salida del equipo francés, en momentos en que Portugal presionaba desesperadamente por el empate.
Además del título de 1998, Zidane ha conseguido el Europeo de 2000 con Francia, mientras con el Real Madrid ha sido campeón de Europa y de la Copa Intercontinental con el Real Madrid.
“Zizou”, Balón de Oro y Mejor Jugador Fifa del Año en dos ocasiones, es la estrella de un equipo que fue prematuramente enterrado por los especialistas por la presencia de veteranos como Fabien Barthez, Thuram, Vieira, Makelele y el propio líder del equipo.
Otro galáctico
Zinedine Zidane intercambió su penúltima camiseta con Luis Figo, con quien compartió cuatro años de carrera en el Real Madrid.
“El Mago” tendrá el domingo próximo en el estadio Olímpico de Berlín una despedida digna de su categoría en la final del campeonato contra Italia.
El capitán francés guardará para su colección de recuerdos las camisetas de algunos de los más grandes jugadores del fútbol actual.
Cuando Francia eliminó a Brasil en cuartos de final, con una actuación magistral de Zidane, el capitán francés trocó su camiseta con Ronaldo, igualmente compañero de equipo en el Real Madrid y máximo goleador en la historia de los mundiales con 15 goles.
El domingo, en la final contra Italia, Zidane jugará el último partido oficial de su vida.
No tendrá enfrente a ningún compañero del Real Madrid y ni siquiera es seguro que se avenga a intercambiar su última camiseta con nadie.
Será una prenda demasiado preciosa como para no quedarse con ella.
Opinión
“Cuando jugamos una Copa del mundo tenemos la impresión de que es un sueño de niño. Es la definición de la felicidad. Ante Portugal, fue un encuentro de muy alto nivel, y contra los italianos será todavía peor”.
Liliam Thuram
Defensa de Francia
