Arnulfo Echeverría, cazador en el área, temible con el remate que salía de ambas piernas, cambió el fútbol por los autos y sigue en la ocupación que eligió hace 31 largos años, luego de haber dejado de pegarle al balón en los estadios del país.
El ex delantero del Marathón y Real España habló con Golazo de sus vivencias, recordó las tardes en que las graderías lucían a reventar en el Estadio Morazán y la playa donde correteaba detrás de un balón en Tela, cuando era niño.
Ahora, convertido en un exitoso ejecutivo, afirma que el fútbol lo persigue, porque a diario sus clientes que llegan lo reconocen.
“Siempre viene gente que cuando entra a mi oficina me dice: ‘Hey, sus goles yo los celebré en más de alguna ocasión’ y nos ponemos a hablar de fútbol”, contó en tono alegre
¿Cómo surge ese amor por la pelota?
Creo que todo jugador de balompié ya nace con ese amor, mis primeros pasos fueron jugando en la playa en Tela y después jugando descalzo en la escuela y hasta en el colegio.
¿Cómo llega a la Liga Nacional?
Gracias a un gran aficionado olimpista en Tela, le llamábamos el maestro Gallardo, me llevó a Tegucigalpa, estuve en el equipo juvenil del club.
Como gran aficionado de los albos soñaba que la estrella de su pueblo fuese al Olimpia, sólo que terminé siendo estrella en otro equipo.
¿Por qué dejó el Olimpia?
En ese tiempo tenía tanto jugador bueno que era difícil llegar al primer equipo. Me salió la oportunidad de pasar a Marathón gracias a un gran amigo, “El Burro” Deras.
¿Qué significó Marathón para usted?
Fue una belleza porque es un equipo que el pueblo sampedrano considera como de su propiedad, entonces jugar con la camisa del Marathón es jugar con el calor de la afición que siempre está pendiente. En Marathón vivíamos como en familia, casi todos éramos buenos amigos.
¿Con la Trinca como fue la relación?
Cuando llegué a Marathón lamentablemente a “Cofra” Caballero lo habían golpeado de una rodilla y “Cucaracha” Fonseca ya estaba por irse a Canadá. Llegué más a conjuntarme con Nayo Caballero y Denis “Plitis” Lagos.
¿Por qué se va Real España?
En 1972, España compró mi transferencia y jugué con el equipo hasta 1975. Pagaron 15 mil lempiras y en ese entonces todo mundo dijo que era una fortuna.
Salió campeón en 1974 y 1975, ¿por qué no se quedó para el tricampeonato?
Me dediqué a la vida profesional mejor, porque no teníamos muchos ingresos como futbolistas en ese entonces. En Marathón sólo ganaba 330 lempiras al mes y en España llegué a ganar mil.
¿Cuáles son sus recuerdos de Marathón?
Mis primeros partidos internacionales en El Salvador, jugar aquí contra el Santos de Brasil, contra Peñarol o Estrella Roja, uno sacaba un poquito más de adentro para hacer excelentes papeles.
¿Qué representó jugar contra Santos?
Aunque perdimos 4-3, fue una gran experiencia. Para uno como futbolista es una inspiración diferente. En ese partido hubo un penal a favor de nosotros y todos lo querían patear, eso es algo que no se olvida.
Arnulfo Echeverría ahora es el gerente de ventas de la distribuidora de vehículos Imvesa. Dice que muchos de sus clientes aún recuerdan cuando jugaba.
Era rápido, de pegada fuerte, ambidextro, sin temor en el área, un centro-delantero de los que era obligación antes. Creo que con Jorge “El Indio” Urquía y Carlos Alvarado teníamos similares condiciones.
¿En Real España cuál título disfrutó más?
El primero, porque fue el que por primera vez se ganó para San Pedro Sula. Significó mucho para todos y el pueblo sampedrano, fue la primera ocasión en que la gente se volcó a celebrar de esa forma, incluso cuando regresábamos de Tegucigalpa nos fueron a recibir fuera de la ciudad.
¿A qué se debió su retiro?
Tuve la suerte de casarme con una gran mujer, muy visionaria. El fútbol en aquel tiempo no daba para lograr estatus económico, aunque tuviésemos una posición social por el deporte, el dinero a veces no alcanzaba. Gracias al empuje de ella y la ayuda de Dios estoy donde estoy.
Dice que la gente siempre lo recuerda..
La gente no olvida la cara de satisfacción que les dimos una tarde en un estadio y eso facilita los negocios.
¿Cada cuánto sucede eso?
Sin pecar de orgulloso, todos los días, siempre hay alguien con quien recordar y hablar un poquito del fútbol, de los goles que anoté en Marathón y Real España.
¿Cuál fue la defensa más difícil?
De Olimpia, Juanín Lanza y Shinola Matamoros. Eran muy recios y marcaban bien por arriba y abajo.
¿Quién fue el portero que más sufrió con usted?
Gorcha Collins. Es un gran amigo, siempre le digo que a él le hice más goles, pero lo niega.
¿Hay algún gol que recuerde especialmente?
Los dos que le anoté al Sporting Cristal de Perú. Jugaba con Marathón aquí en San Pedro Sula, en 1971. El portero de ellos era Rubinho, venía de jugar el campeonato Mundial de México’ 70, en el primero le pegué fuerte de derecha y en el segundo, le hice un sombrerito. Marathón ganó 2-1.
¿Fue seleccionado?
Sí, jugué en dos procesos de la Selección Nacional, para las eliminatorias de 1970 y para el Mundial de 1974. Fui parte de la Selección en aquel famoso empate 3-3 con Costa Rica. Recuerdo también que le anoté un gol a Haití en los primeros 50 segundos, también jugué contra México en el Norceca, previo al Mundial del 74.
El ex atacante nacido en Olanchito, Yoro, conserva un álbum donde guarda fotografías de su pasado en las canchas.
“El Marathón de ahora es una empresa y el de ayer era un equipo. Con la organización de hoy creo que hubiésemos obtenido muchos logros”.
“Me desarrollé en el fútbol admirando a Pelé, por eso nunca dejé que me quitaran la camiseta número 10 en los equipos donde jugaba”
“Sigo siendo seguidor del Marathón, soy verde, aunque siempre hago fuerza por los dos equipos de San Pedro Sula”.
Historia
Debutó el 6 de julio de 1969 en el triunfo de su equipo Marathón 4-3 sobre el Vida, anotó el primer gol del partido.
Goles con Marathón
Torneo 1969-70: 13 goles
Torneo 1970-71: 9 goles
Torneo 1971-72: 12 goles
Goles con Real España
Fue dos veces campeón con el equipo catedrático.
Torneo 1972-73: 3 goles
Torneo 1973-74: 6 goles
Torneo 1974-75: 13 goles y fue campeón con Real España
Torneo 1975-76: 1 gol y fue campeón con Real España
Goles con Platense
Torneo 1977-78: 3 goles
Torneo 1978-79: 4 goles
En total anotó 64 goles, 34 con Marathón, 23 con Real España y 7 con Platense. Anotó su último tanto en la Liga el 23 de abril de 1978 en Puerto Cortés, jugando para Platense contra el equipo que lo dio a conocer, el Marathón, en el empate 1-1.
