Recife, Brasil.
Luis Gabelo Conejo, el recordado guardameta de Costa Rica que brilló en el Mundial de Italia-1990, disfrutó desde el segundo plano como entrenador de arqueros de la ‘Sele’ el histórico pase a cuartos de final de Brasil-2014, donde su pupilo Keylor Navas fue el héroe.
Desde hace meses, las comparaciones entre Conejo y Navas son inevitables y el partido del domingo en el Arena Pernambuco fue el partido en el que se pasó oficialmente el testigo, el día en el que el alumno superó al maestro, al menos en lo que a recorrido mundialista se refiere.
Luis Gabelo Conejo, apodado el ‘Conejo de la suerte’ por sus intervenciones espectaculares, fue una de las estrellas del Mundial-1990, donde la publicación France Football le designó como mejor arquero del torneo junto al italiano Walter Zenga.
Asombró a todos en la primera fase, en la que Costa Rica ganó a Escocia (1-0) y Suecia (2-1), y perdió sólo por 1-0 ante Brasil, por un solitario gol de Müller tras un partido en el que la Seleçao tuvo muchos problemas.
Sufrió una lesión de hombro en el último partido de la primera fase y se perdió por ello el duelo de octavos ante Checoslovaquia en Bari, en el que fue reemplazado por su suplente, Hermidio Barrantes, que fue el que sufrió el 4-1 a favor de los europeos, con un ‘triplete’ de Tomas Skuhravy.
Pese a esa eliminación, el papel de Costa Rica y de Conejo en la primera fase fue destacado por todos y quedó en la retina de los buenos aficionados.
Fue el orgullo del fútbol tico hasta este Brasil-2014, en el que la Tricolor ha conseguido hacer historia colocándose entre los ocho mejores del mundo y Luis Gabelo Conejo, que ahora tiene 54 años, ha superado de manera indirecta lo que su generación consiguió en el Mundial italiano.
Pero lejos de vanidades personales, ya aclaró hace unos días en la concentración del equipo en Santos que estaría feliz si Keylor Navas, su dignísimo heredero, conseguía superarlo. “Las comparaciones son odiosas y personalmente me alegraré muchísimo de que llegue muy lejos. La comparación entre nosotros no me toca a mí”, afirmó.
La estrella del partido
Navas, que empezó su carrera europea en el modesto Albacete del fútbol español, un club por el que también pasó Conejo, se ha mostrado especialmente ilusionado por poder seguir los pasos de su ídolo. El domingo acaparó todos los focos con sus impresionantes paradas, especialmente dos ante Konstantinos Mitroglou, una en el descuento final del partido y otra en el descuento del alargue, consiguiendo que su equipo llegara vivo a la tanda de penales.
Allí detuvo el lanzamiento de Theofanis Gekas, el cuarto de los griegos, y el pleno de aciertos de sus compañeros, con uno último convertido por Michael Umaña hizo el resto, y Costa Rica avanzó a unos cuartos históricos.
Después del partido todos lo elogiaron, incluido el seleccionador de los griegos, el portugués Fernando Santos, que estimó que sin Navas su equipo hubiera ganado.
Fue galardonado por segunda vez consecutiva tras el empate 0-0 ante Inglaterra como mejor jugador del partido por la Fifa.
Luis Gabelo Conejo, el recordado guardameta de Costa Rica que brilló en el Mundial de Italia-1990, disfrutó desde el segundo plano como entrenador de arqueros de la ‘Sele’ el histórico pase a cuartos de final de Brasil-2014, donde su pupilo Keylor Navas fue el héroe.
Desde hace meses, las comparaciones entre Conejo y Navas son inevitables y el partido del domingo en el Arena Pernambuco fue el partido en el que se pasó oficialmente el testigo, el día en el que el alumno superó al maestro, al menos en lo que a recorrido mundialista se refiere.
Luis Gabelo Conejo, apodado el ‘Conejo de la suerte’ por sus intervenciones espectaculares, fue una de las estrellas del Mundial-1990, donde la publicación France Football le designó como mejor arquero del torneo junto al italiano Walter Zenga.
Asombró a todos en la primera fase, en la que Costa Rica ganó a Escocia (1-0) y Suecia (2-1), y perdió sólo por 1-0 ante Brasil, por un solitario gol de Müller tras un partido en el que la Seleçao tuvo muchos problemas.
Sufrió una lesión de hombro en el último partido de la primera fase y se perdió por ello el duelo de octavos ante Checoslovaquia en Bari, en el que fue reemplazado por su suplente, Hermidio Barrantes, que fue el que sufrió el 4-1 a favor de los europeos, con un ‘triplete’ de Tomas Skuhravy.
Pese a esa eliminación, el papel de Costa Rica y de Conejo en la primera fase fue destacado por todos y quedó en la retina de los buenos aficionados.
Fue el orgullo del fútbol tico hasta este Brasil-2014, en el que la Tricolor ha conseguido hacer historia colocándose entre los ocho mejores del mundo y Luis Gabelo Conejo, que ahora tiene 54 años, ha superado de manera indirecta lo que su generación consiguió en el Mundial italiano.
Pero lejos de vanidades personales, ya aclaró hace unos días en la concentración del equipo en Santos que estaría feliz si Keylor Navas, su dignísimo heredero, conseguía superarlo. “Las comparaciones son odiosas y personalmente me alegraré muchísimo de que llegue muy lejos. La comparación entre nosotros no me toca a mí”, afirmó.
La estrella del partido
Navas, que empezó su carrera europea en el modesto Albacete del fútbol español, un club por el que también pasó Conejo, se ha mostrado especialmente ilusionado por poder seguir los pasos de su ídolo. El domingo acaparó todos los focos con sus impresionantes paradas, especialmente dos ante Konstantinos Mitroglou, una en el descuento final del partido y otra en el descuento del alargue, consiguiendo que su equipo llegara vivo a la tanda de penales.
Allí detuvo el lanzamiento de Theofanis Gekas, el cuarto de los griegos, y el pleno de aciertos de sus compañeros, con uno último convertido por Michael Umaña hizo el resto, y Costa Rica avanzó a unos cuartos históricos.
Después del partido todos lo elogiaron, incluido el seleccionador de los griegos, el portugués Fernando Santos, que estimó que sin Navas su equipo hubiera ganado.
Fue galardonado por segunda vez consecutiva tras el empate 0-0 ante Inglaterra como mejor jugador del partido por la Fifa.
