Cuando el árbitro salvadoreño, que pita el partido entre Honduras y Guatemala, anunció el final del primer tiempo, el entrenador de Honduras, Jorge Luis Pinto, corrió hasta el centro del campo a reclamarle porque no le pitó algunas duras entradas que cometieron los chapines.
De inmediato la seguridad del juego llegó para proteger en juez Elmer Bonilla que solamente escuchó como Pinto se quejó fuertemente haciendo ademanes con sus manos.
En ese instante el cuerpo técnico de Guatemala también se acercó a la cuarteta arbitral y hubo un cruce de palabras y hasta empujones entre Amado Guevara, asistente de Pinto con el preparador físico chapín Hebert Martínez y tuvo que intervenir el personal de Concacaf porque se dijeron de todo.
La molestia del cuerpo técnico catracho ha sido durante todo el primer tiempo porque los hondureños han recibido duras patadas, principalmente Óscar Salas y Allan Banegas quienes son los encargados de la conducción y el juez cuscatleco no ha sancionado.

