Hay un famoso refrán hondureño que dice que “los lunes ni las gallinas ponen”. Pero eso no se aplica en la afición hondureña quien llegó ayer al estadio Olímpico para respaldar a la Bicolor en el amistoso contra Serbia.
Los sampedranos no defraudan a su Selección y se fueron con todas las ganas que siempre le ponen en las gradas.
Y la escuadra catracha no defraudó y desde los primeros minutos comenzó a llenar de emoción los corazones del fiel aficionado sampedrano.
Los hondureños están viviendo un preámbulo de lo que será la eliminatoria, donde el próximo año arrancamos contra Panamá.
