Tegucigalpa, Honduras.
A las puertas de la gran final del Torneo Clausura 2014 de la Liga Nacional de Honduras, el portero del Olimpia, Donis Escober, se prepara para recibir el premio del esfuerzo hecho durante todo el certamen, el título.
“Para todo jugador ganar un campeonato es lo más alto, es el premio del esfuerzo que se hace durante todo un torneo y más ahorita que estamos muy golpeados por lo que vivimos por la humillación que pasamos, pero eso es lo bonito del fútbol que nos tiene a las puertas de lograr otro objetivo”, comentó el guardameta olimpista.
“Siempre se siente esa tensión, más bien cada vez se siente más porque cada vez uno se enamora más del fútbol y el día que uno no sienta esta pasión o sensación creo que ese día habrá muerto para mí. Hay mucha tensión, mucho nerviosismo, pero eso es positivo porque mientras yo sienta eso significa que disfruto el fútbol”, agregó refiriéndose a las sensaciones que conlleva pelear una final en Honduras.
¿Se ve favorito? “Es que casi siempre que llegamos a una final nos dan como favoritos por la grandeza del equipo, siempre nos tiran esa presión a nosotros, pero ya estamos acostumbrados. Lo importante es que aquí hay grandes jugadores que ante esa presión siempre hemos sabido salir adelante y esta no es la excepción. Hay que tratar de convertir esa presión en ventaja y tratar de estar bien concentrados”.
A pesar de estar curtido en finales, el también arquero de la Selección Nacional asegura que los nervios y la tensión toman parte en estos partidos.
“Es una tensión muy grande, a veces uno ni come ni duerme bien porque es una responsabilidad muy grande, estamos hablando de todo un país y todos queremos darle esa alegría a esa gente”, indicó.
Agregando que “En este torneo hemos sufrido, cuando nos dijeron que éramos unos vendidos lo tengo clarito y eso me dolió mucho y nos dimos cuenta que en estas situaciones complicadas solo la familia está con uno, entonces tenemos que hacerlo por nosotros y por nuestras familias”.
Según confesó Escober “es un orgullo estar en una nueva final”. El meta albo vive intensamente el hecho volver a celebrar un campeonato y está consciente que en su cancha las posibilidades son mayores. “A nivel mundial nadie se acuerda de un segundo lugar, casi siempre lo que vale es el primer lugar y esperamos ganar la copa para seguir haciendo historia en este equipo grande”, expresó.
¿Cómo se ve el domingo a las 8:00 de la noche? “Me veo feliz, en mi casa, tranquilo, con un nuevo título, esa es la mentalidad y sino, todo pasa por algo y hay que darle la gloria y honra a Dios porque todo pasa por algo. Si ganamos a disfrutarlo y sino felicitaremos a Marathón, pero esperamos lograrlo nosotros”, cerró.
