El Barcelona firma el pleno de victorias en el inicio liguero, para pasar a liderar en solitario la clasificación de Primera División, tras su último triunfo ante el Valencia (1-0), en una jornada, la tercera, que dejó los primeros goles de Cristiano Ronaldo para el Real Madrid, sin celebración antes de alimentar un debate.
“Estoy triste y dentro del club saben por qué”. Es una frase de Cristiano que enciende las alarmas. El día que debía celebrar alcanzar 150 goles desde que llegó al Real Madrid. Protagonizar una nueva cifra escandalosa de un futbolista mayúsculo que tiene comportamientos difíciles de justificar. Ninguno de sus dos primeros goles del curso liguero tuvieron celebración. Serio. Mostrando que algo le incomoda.
El Real Madrid obtuvo su primer triunfo en Liga al tercer intento. Un 3-0 con poco fútbol para derribar el orden del Granada. Una tarde de resaca de la Supercopa en el Bernabéu, que decidió la pegada de Cristiano, ilusionó el estreno del croata Luka Modric y cerró el triunfo el argentino Gonzalo Higuaín. El Barcelona sigue a su ritmo. Se levantó del palo anímico de perder el primer título de la temporada ante su gran rival. Lo hizo en un duelo siempre complicado, ante el Valencia, y con el gol de la jornada.
El brasileño Adriano encontró la escuadra con su disparo. No le hizo falta brillar más al líder. Se estrenó el ghanés Alex Song como titular y el equipo che pudo empatar en el último instante.
Víctor Ruiz que había visto cómo le anulaban un gol por fuera de juego, tuvo un cabezazo a placer tras un córner que remató arriba. Dos puntos de nueve posibles es el mal balance para un Valencia que no encuentra el camino de la victoria. Las primeras jornadas de liga muestran una clasificación siempre sorprendente. Es segundo el Mallorca. Extendiendo el buen trabajo de Joaquín Caparrós de la pasada campaña. Siete puntos de nueve posibles. Derrotó a la Real Sociedad con un gol de Víctor Casadesus. Es tercero al Málaga que silencia con fútbol el agobio económico que hizo peligrar su etapa más gloriosa en un verano de locos.