Con el Santo de espaldas

31 mayo 2008 /
Redacción La Prensa

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Cruz Azul llega a la final de mañana al estadio Corona con desventaja y la misión de remontar el 2-1 que le propinó el Santos en el juego de ida de la final del torneo Clausura de México.

La Máquina cementera no pudo capitalizar el buen fútbol que generó en la primera mitad de ese juego y Santos Laguna le dio la vuelta en el complemento para llevarse ventaja.

El conjunto azul se puso en ventaja. El primer gol del partido fue obra del delantero uruguayo de Cruz Azul, Nicolás Vigneri, a los 15 minutos. Por Santos marcó Fernando Arce a los 61 y el ecuatoriano Christian Benítez a los 87.

La Máquina necesita ahora ganar por dos goles de ventaja.

Cruz Azul salió decidido a tomar ventaja en casa y desde el silbatazo inicial se fue sobre el arco enemigo, cobijado por el apoyo de su afición.

El paraguayo Carlos Bonet y César Villaluz se coordinaron por la derecha para elaborar los avances celestes, mientras que Jaime Lozano y Edgar Andrade lo hicieron por la izquierda.

Además de la presión de La Máquina, Santos parecía aturdido y no pudo superar el mediocampo en los minutos iniciales.

El cuadro lagunero consiguió así romperle el invicto a los celestes en su casa y regresar con todo a su favor al Estadio Corona para definir esta final en busca de su tercer trofeo como campeón.

El arbitraje estuvo a cargo de Marco Antonio Rodríguez, quien tuvo una labor buena.

Con eso la misión de Sergio Markarián de darle un título los cementeros después de 10 años de frustraciones, está complicada y el uruguayo está contra las cuerdas para volver a levantar la copa después de haberlo hecho por última vez en el torneo de invierno de 1997.

Mientras el Santos puede alcanzar el su tercer título en la historia.