Don Nicolás Suazo lo estaba esperando desde las 3.30 de la tarde en el aeropuerto sampedrano. Pero apenas vio a su hijo David Suazo por cinco minutos. Le dio un abrazo, le dijo que su mamá Josefina le mandó saludos y le tocó ver cómo se lo llevaron los periodistas y aficionados.
El delantero del Inter tenía más de dos años de no venir a Honduras. Por eso no pudo ocultar su felicidad.
¿Estás contento por regresar? 'Sí, ésta es mi casa', respondió mientras firmaba autógrafos y se tomaba fotos con los fanáticos, a ellos no les importó que no haya anotado el domingo ante Costa Rica.
Don Nico no llora, tal vez porque no es un hombre muy emotivo. Pero dijo que 'estoy muy contento por el regreso de mi hijo, por supuesto que me alegra su llegada'.
Lo que lamenta es que 'La Pantera' estará en la concentración. 'Quisiera que se quedara en la casa, pero no se puede', expresó.
En la conferencia de prensa brindada a los medios de comunicación se portó como un caballero. Le sonrió a las cámaras y explicó que 'volver a Honduras para ver a mi familia y los aficionados me emociona mucho'. Está muy agradecido con las muestras de cariño que le ha mostrado la gente. 'Regresar a Honduras me da orgullo, quiero demostrar cómo he mejorado. A ustedes no los olvido', continuó. Antes de ir al entrenamiento comió baleadas en el hotel con el resto de los jugadores. él mismo se las preparó, las cargó de frijoles. También las extrañaba.
Con papá David Suazo abrazó a Don Nicolás, quien se moría por ver a su hijo.
Sobre el penal
David explicó que después de fallar el penal en el amistoso contra los ticos se rió 'porque lo hice de forma irónica. A nadie le gusta fallar una penal. Aquí quiero dar el máximo'.
Sobre el trabajo
Al delantero le agrada la forma en que trabaja la Selección Nacional. 'Estamos haciendo las cosas bien. Vengo a contribuir con mi experiencia como futbolista'.
