Benito Floro, seleccionador de Canadá, es de esos técnicos metódicos, hecho de fórmulas y estudios.
Se le puede describir incluso como un “revolucionario” del fútbol. Para él, sus equipos tienen que tener identidad, estilo. Eso llevó al asturiano a un ascenso en su carrera a partir de su debut a finales de la década de los 70.
A sus 63 años, el “mago de la pizarra” está curtido de experiencia, incluyendo haber dirigido a Butragueño y Rafael Martín Vázquez, parte de aquella generación icónica en el Real Madrid: la “quinta del Buitre”.
El asturiano nunca escondió su simpatía hacia el Atlético durante la infancia. En sus recuerdos guarda la imagen del hondureño José Enrique “Coneja” Cardona (QDDG), histórico para los colchoneros. También disfrutó de la clase de los catrachos Gilberto Yearwood, Roberto “Macho” Figueroa y Carlos Pavón.
En 1998 comienza sus excursiones fuera de España -Japón, México, Ecuador y Marruecos- para ampliar sus conceptos. En 2013 decide aventurarse con un reto mayor y asume la dirección técnica de Canadá.
Con los años ha logrado empaparse de lo que sucede en el área y eso quiere demostrar en su debut eliminatorio contra Honduras, el próximo 13 de noviembre.
¿Cuáles son las expectativas que tiene para esta etapa de la eliminatoria?
Las de clasificar a la hexagonal.
¿Cómo define a Honduras como rival?
Un rival histórico, con buenos jugadores y un técnico cualificado.
¿Qué conoce del equipo hondureño?
Recientemente, todo lo que me ha ofrecido la información de los partidos en Centroamérica, del mundial (Brasil 2014) y de la Copa de Oro (2015).
Canadá ha sido piedra de tropiezo en ocasiones para Honduras, pero en su último choque fue goleado 8-1. ¿Cuán diferente es esta Canadá de aquel equipo?
No me gustan las comparaciones y menos en el fútbol, donde sus condiciones cambian rápidamente.
¿Qué se le viene a la mente cuando escucha “Honduras”?
El de un país hermano. El Mundial de España 82 con su buena actuación. Sus actuaciones internacionales a lo largo de todos estos años. Y jugadores como Cardona (de pequeño yo era forofo seguidor de los colchoneros, pero desconocía que fuese hondureño). Gilberto, todo un manual de futbolista completo. Figueroa principalmente por su estadía en el Murcia y Pavón porque jugaba en el Celaya cuando yo era entrenador de los Rayados de Monterrey.
¿Qué jugador nuestro sería titular en un equipo dirigido por usted?
Es una pregunta incómoda de responder.
Jorge Luis Pinto halagó a su equipo y dijo que es “de mucha pelea”. ¿Qué opina?
El fútbol es pura lucha; si no peleas, no puedes ganar.
¿Qué referencias tiene sobre las eliminatorias de la Concacaf?
Las que he obtenido de mi etapa en México y ahora las de revisar partidos anteriores por video.
Ha escuchado del calor en el estadio Olímpico. ¿Lo preocupa?
No, son condiciones que hay que afrontar.
Acá están preocupados con la idea de que los lleven al frío de Vancouver. ¿Puede eso marcar una diferencia?
Pues deberían estar contentos. Peor sería jugar en el frío de Toronto. No debe preocuparles, el estadio es cerrado.
Cuál sería el número mágico para clasificar a la hexagonal?
Conseguir un punto más que el que vaya detrás para alcanzar la clasificación.
Muchos dicen que México va a clasificarse fácil. ¿Qué piensa?
Fácil en el fútbol no hay nada. Pero tienen más potencial que el resto.
Prevé un grupo parejo?
Sí, veo bastante semejanza en los tres equipos, sin contar México.
Por ser locales en ese primer partido, ¿son favoritos?
No debemos serlo por ser locales, sino por la calidad de juego, y eso hay que demostrarlo.
Se van a enfrentar dos de los mejores entrenadores de selecciones en Concacaf: usted y Pinto. ¿Qué sabe de él?
Gracias por sus palabras, pero sinceramente no me considero mejor ni peor que nadie. De Pinto sé que me ha permitido compartir una cena con él y su actuación con Costa Rica en el mundial, que ha sido excelente. Es un entrenador que vive su profesión con gusto y pasión.
Cómo se imagina ese partido del próximo 13 de noviembre?
Difícil, pero son retos que te llena de ilusión prepararlos y de felicidad si el equipo gana y si es posible jugando bien, con merecimiento.
Canadá, Honduras y El Salvador, todos contra México, ¿es así?
Para mí no. Es un todos contra todos.