REDACCIÓN. Las relaciones de pareja son un tema de suma complejidad, pues el vínculo entre dos personas puede ser condicionado por diversos factores relacionados con el carácter intrínseco de cada individuo y al modo de crianza que estos recibieron durante sus primeros años de vida.
El apego ansioso y el trastorno evitativo son dos tipos de vínculos emocionales muy recurrentes en las parejas disfuncionales, y ambos encuentran su origen en la etapa de la infancia.
Según la psicoterapeuta Ada Mejía, el apego ansioso puede ser causado por razones muy diversas, pero en general, sobresale una crianza estricta donde el niño respondía a grandes exigencias de sus padres a cambio de recibir cariño.
Por otro lado, el trastorno evitativo es causado por el abandono físico o emocional de los padres donde el niño crece sin una figura amorosa y donde se le invalidan constantemente sus necesidades afectivas.
Características del apego ansioso. Este tipo de apego está constituido por varios comportamientos, entre ellos la inseguridad; estas personas buscan constantemente sentirse amadas y aprobadas por su pareja, cayendo así en una dependencia emocional.
Trastorno evitativo: Este grupo de personas, a raíz del rechazo sufrido en la niñez, se aíslan emocionalmente, cohibiéndose a sí mismos de expresar sus sentimientos y necesidades, a la vez que evaden la responsabilidad afectiva.
Las personas que padezcan alguno de estos trastornos no podrán entablar una relación sana hasta que arreglen sus conflictos emocionales, mientras tanto, en el afán de amar y ser amados, experimentarán una serie de desilusiones que pueden afectar otras áreas de la vida.
LO QUE DEBES SABER
1. Si te identificas como una persona codependiente es necesario que reflexiones acerca de las situaciones que te hacen sentir insegura y a qué se deben.
2. Si eres una persona con un trastorno evitativo, posiblemente te has cerrado a la posibilidad de sanar tus heridas de la infancia. Meditar sobre ello es el primer paso.
3. En ambos tipos de trastornos se requiere de la intervención de un psicoterapeuta para sanar desde lo más profundo. Pero tranquila, el apego no es algo crónico.
Si te identificas como una persona codependiente es necesario que reflexiones acerca de las situaciones que te hacen
sentir insegura y a qué se deben.
Si eres una persona con un trastorno evitativo, posiblemente te has cerrado a la posibilidad de sanar tus heridas de la infancia. Meditar sobre ello es el primer paso.
En ambos tipos de trastornos se requiere de la intervención de un psicoterapeuta para sanar desde lo más profundo. Pero tranquila, el apego no es algo crónico.
