Una de las áreas que más se ensucian y que, por si fuera poco, también es una de las más difíciles de limpiar es la estufa. Sin importar el tipo de detergente que uses para dejarla como nueva, la estufa es todo un desafío.
Existe un método sencillo para reducir la suciedad que cae en esta y que es muy económico, y el cual las empresas de banquetes utilizan cuando preparan la comida en casas ajenas, ya que facilita enormemente la limpieza.
Lo único que debes de hacer es colocar una lámina de aluminio sobre la estufa, asegurándote de no tapar la salida de gas de las hornillas ni las piezas de las hornillas.
El aluminio es un material que aguanta altas temperaturas y no es absorbente, por lo que, sin importar qué líquido o materia grasa le caiga encima, este lo aguantará. Cuando termines de cocinar, retira el papel aluminio y, de ser necesario, pasa un trapo húmedo sobre la estufa, y ¡listo!
El forrar con papel aluminio es un viejo trucos de nuestras abuelas y si funciona!
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