Si quiere conocer el mundo que apasiona a su hijo preadolescente, debe convertirse en un papá millennial. Para ello es necesario que ingrese a su mundo, donde la Internet, las redes sociales y la tecnología son esenciales.
Usted se preguntará ¿qué tanto ven los chicos en su dispositivo móvil? Los expertos dan algunas respuestas.
“La preadolescencia es la etapa que más preocupa a los progenitores por la falta de comunicación con sus hijos. Ellos están en la etapa en que deben tomar sus propias decisiones, por lo que la plática con sus padres se reduce a una cuarta parte de lo que hablaban antes”, comenta la psicóloga Viridiana Torres.
Los ídolos de sus hijos, que en su mayoría están en Internet, dice Torres, son seguidos porque son comunes y corrientes, tienen las mismas inquietudes, los mismos problemas, ven el mundo con los mismos ojos y se sienten identificados.
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Si los nombres de “Yuya”, “Werevertumorro” y “Hola Soy Germán” no le dicen nada, es hora de que los conozca. Tómese el tiempo de ver, a solas, estos personajes en Internet, ver de qué hablan, el lenguaje que utilizan y qué soluciones le dan a la vida.
“Converse con sus hijos sobre los contenidos; y más que prohibírselos, es dar su punto de vista, qué es real y qué es ficción y, sobre todo, dejarles en claro que todo lo que ven puede darles un panorama de la vida; pero que él debe tomar sus propias decisiones”, añade el psicólogo Arturo Garza.
El miedo de los padres es que sus hijos vean contenidos inapropiados, y erróneamente se cree que los candados cibernéticos los alejarán de los malos contenidos. “Creer que hay suficientes restricciones para evitar que los jóvenes vean programas no aptos en Internet es un error. Los millennials son capaces de desbloquear cualquier candado. Lo mejor es saber los temas que su hijo puede encontrar en las redes, que los jóvenes tengan la confianza de platicarlo con los padres y darles un panorama más real de los problemas que tristemente hay en Internet, como la trata de adolescentes, la pornografía y otros”, concluye Torres.
Ventajas y desventajas
Los padres millennials son los progenitores del nuevo siglo. Estos tienen una relación más democrática con sus hijos, ya que están “conectados” en la misma frecuencia.
“Sin duda alguna, los padres millennials están más cerca de sus hijos. Esto les da mayor confianza a los jóvenes, puesto que pueden compartir sus opiniones con los progenitores”, explica la psicóloga Liza Zelaya.
Por otra parte, el mundo de la tecnología les ofrece herramientas útiles para la educación de sus hijos.
No obstante, el hecho de que estén conectados en la misma sintonía y que compartan su afición por las redes sociales y los dispositivos electrónicos no significa que deban perderse los abrazos, besos y las muestras de afecto.
“Los padres e hijos millennials están al tanto de los avances tecnológicos, pero en las reuniones familiares tiene que prevalecer el cariño y las conversaciones. No pueden mostrar más atención a sus dispositivos”, enfatiza la experta.