Familia y Hogar
San Pedro Sula.
La mujer embarazada no debe comer por dos, pero sí alimentarse de forma adecuada para que ella y el bebé se mantengan saludables.
La nutricionista Danori Carbajal detalla que “la nutrición en esta etapa desempeña un papel muy importante, pues el estado nutricional de la madre tiene un impacto directo en la evolución de la gestación, y por ende, en el feto. Para que se tenga idea del impacto de una nutrición insatisfactoria: durante la segunda mitad del embarazo se puede afectar el crecimiento y el peso del producto al nacer”.
Asegura que “los bebés que nacen con bajo peso tienden a ser desnutridos, en especial si son nacidos a término. Entre ellos hay mayor incidencia a presentar complicaciones posnatales y mortalidad”.
Anabel Aragón, experta en nutrición, de España, comenta que “las embarazadas pueden llevar una alimentación variada y equilibrada; es muy importante porque puede ayudar a prevenir complicaciones en la salud del bebé y de la madre”.
Entre las dificultades que producen están un aumento excesivo del peso que puede ir, o no, acompañado de una diabetes gestacional.Esto significa un aumento de la glucosa en la sangre de la madre, y esta glucosa que sobra atraviesa la placenta y afecta al bebé.
“Puede ocurrir que esta hormona que se produce en exceso se almacene como grasa y le pueda provocar sobrepeso al nacer”, explica. Es posible que haya anemia por deficiencia de hierro y susceptibilidad de infecciones de la madre.
Afección
Otra es probable que sea un bajo peso del bebé al nacer o un nacimiento prematuro. Puede ocurrir por una ingesta de exceso de cafeína, tabaco o alcohol, por ejemplo. La deficiencia de ácido fólico causa a veces anomalías congénitas graves como el “defecto del tubo neural. A mujeres que están pensando en quedar embarazadas se les aconseja que empiecen a tomar un suplemento de ácido fólico”, asegura.
Comenta que “si estamos ante una mujer sana, de peso normal, que toma un promedio de unas 2,000 kilocalorías al día, se recomienda aumentar el consumo de 150 calorías en el primer trimestre y 350 en los siguientes trimestres”.
Anabel Aragón comenta que la cantidad de peso ganado durante el embarazo varía según el estado nutricional y la constitución de la madre, y siempre deben ser asesoradas por su médico de cabecera: el aumento estándar para una persona saludable con peso normal puede oscilar entre 11 a 16 kilos, más o menos.
Si una mujer tiene sobrepeso debe aumentar menos el peso durante su embarazo, entre unos 5 o 10 kilos.
En mujeres que están por debajo de su peso recomendado o mujeres que tienen múltiples bebés (gemelos, etc) se debe aumentar de 15 a 20 kilos, aproximadamente.
Recomendaciones en mujeres vegetarianas o veganas
“Es necesario tener unas recomendaciones especiales porque los requerimientos nutricionales de proteínas, minerales y vitaminas se elevan”, relata Anabel., quien señala que se debe prestar especial atención a ciertos aspectos de la alimentación como por ejemplo: los productos lácteos como los huevos y los productos de colmena como la miel, jalea y el polen. Estos pueden constituir fuentes de aminoácidos, proteínas, vitaminas y minerales en una dieta vegetariana.
Si no se consumen estos alimentos porque deciden excluir todo producto de origen animal, es imprescindible asegurarse que se obtiene suficiente proteína de fuentes vegetales a través del aumento de consumo de: legumbres, frutos secos, levadura de cerveza, germen de trigo y a veces suplementación.
“Lo más recomendable es que un nutricionista o un profesional de la salud cualificado, asesore de cómo cuidar la dieta para que no surjan deficiencias de ácido fólico, aminoácidos esenciales, hierro, calcio y proteína”, ratifica la profesional en nutrición.
Consejos nutricionales
Según la nutricionista Danori Carbajal, los nutrientes que debe consumir la embarazada son las proteínas (leche, huevo, queso y carnes) y los líquidos: es importante ingerir 10 vasos de agua por día.
Los carbohidratos: necesita carbohidratos complejos (arroz, tortilla, pan, cereales y otros) para tener la energía suficiente en forma utilizable para el bebé. Asegúrese de consumir una dieta equilibrada.
El folato: ingerirlos dos meses previos al inicio del embarazo hasta el primer trimestre. Consuma alimentos con ácido fólico (cereales); incluya hortalizas, naranjas, jugos de naranja y jugo de piña.
El calcio: es necesario durante la gestación para la formación del esqueleto y los dientes. Se recomienda un adicional de 300 mg de calcio durante la gestación, además de su requerimiento habitual.
El Hierro se recomienda que las embarazadas reciban suplementos de hierro oral durante el segundo y tercer trimestre.
