Los analgésicos: un riesgo letal para los niños 

'La epidemia de opiáceos no ha pasado por alto a los niños', lamentó el Dr. Yaron Finkelstein.

  • 01 mar 2017

Redacción.

El riesgo de un niño de una sobredosis potencialmente letal aumenta en más del doble si uno de los padres lleva a casa un opiáceo (analgésico) recetado como la oxicodona, la codeína o la morfina, informa un estudio.

Cuando a la madre se le receta un opiáceo para el dolor, en lugar de un fármaco no narcótico como la aspirina, el ibuprofeno o el acetaminofén, los niños pequeños tienen más o menos dos veces y media más probabilidades de sufrir una sobredosis accidental, encontraron los investigadores.

'La epidemia de opiáceos no ha pasado por alto a los niños', lamentó el Dr. Yaron Finkelstein, médico de emergencias pediátricas en el Hospital de Niños Enfermos de Toronto. 'También son vulnerables ante la epidemia, incluso como tercera parte o víctima circunstancial'.

Finkelstein es el investigador líder del estudio, publicado en la edición en línea del 20 de febrero de la revista Pediatrics. Otro estudio en la revista ayuda a explicar el origen de parte de ese riesgo.

Foto: La Prensa


Casi un 70 por ciento de los opiáceos recetados en los hogares con niños no se guardan de forma segura, reportaron los investigadores de la Universidad de Johns Hopkins en ese trabajo.

Los padres parecen comprender que sus hijos son más vulnerables a las sobredosis que los adultos, pero no toman medidas para prevenirlas en sus hogares, señaló la investigadora líder, Eileen McDonald.

'Las personas pueden apreciar que hay un problema, pero todos tenemos unos factores de autoprotección que nos hace pensar que no nos pasará a nosotros', dijo McDonald, científica asociada en la Facultad de Salud Pública Bloomberg de la Hopkins, en Baltimore.

A lo largo de las dos décadas anteriores, las tasas de recetas de los potentes analgésicos narcóticos para el dolor han ido aumentando, conduciendo a la peor epidemia de sobredosis de la historia, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.

En el estudio de Finkelstein, él y sus colaboradores evaluaron los casos de sobredosis en niños en Ontario, Canadá, entre 2002 y 2015. También examinaron los registros de recetas que mostraban qué madres habían recibido un analgésico opiáceo o un antiinflamatorio no esteroide (AINE).

Los investigadores se enfocaron en los niños de 10 años o menos de edad, dado que los adolescentes podrían haber utilizado de forma deliberada la receta de uno de sus padres para drogarse, dijo Finkelstein.

Los niños tenían 2.4 veces más probabilidades de sufrir una sobredosis de opiáceos después de que su madre recibiera un opiáceo recetado, en comparación con los hijos de mujeres que recibieron un AINE como el ibuprofeno (Advil) o el acetaminofén (Tylenol), encontraron los investigadores.

La mitad de los niños tratados por sobredosis eran menores de dos años. Los opiáceos más comúnmente involucrados fueron la codeína (un 54 por ciento); la oxicodona, con la marca OxyContin (un 32 por ciento), y la metadona (un 15.5 por ciento), reportaron los investigadores.