El estrés también afecta a los niños

Los pequeños están expuestos a muchas presiones dentro de la sociedad. Esto puede causarles problemas de tensión y ansiedad.

  • 04 nov 2016

Redacción.

Como adultos es fácil pensar que los pequeños viven en un estado permanente de felicidad y desentendimiento de las verdaderas preocupaciones, después de todo, podrían pensar algunos, sus responsabilidades son mínimas.

Sin embargo, entre tareas, exámenes, actividades extracurriculares, deberes en casa, problemas con compañeros de la escuela y maestros y los conflictos propios de la niñez y la adolescencia, ellos a veces viven con más estrés del que pudiera parecer a primera vista.

El estrés es una función de las demandas sobre cada persona y su habilidad para realizarlas, de acuerdo con el artículo Estrés de la infancia, publicado por el sitio KidsHealth. Conforme van creciendo, las presiones académicas y sociales, especialmente por tratar de encajar, crean tensión en los menores.

Detectando el problema.

Para ayudar a los hijos, es importante recordar que un cierto grado de estrés es normal. Siempre va a haber obstáculos o situaciones que van a causar ansiedad en diferentes grados; no se puede escudar a los hijos por siempre. Es necesario enseñarles a sobrellevar los problemas.

No obstante, hay que estar alerta de los cambios que indican que algo está mal para tomar cartas en el asunto; por ejemplo, cambios de humor, dificultades para dormir y problemas para concentrarse.

“Las expectativas con respecto a un niño y un adolescente son muy diferentes y por eso hay una presión social sobre lo que se espera del menor, y eso afecta el estado de ánimo y físico de una persona”, expresa Julia Reyna de Cárdenas, maestra de secundaria.