El empaque perfecto para la merienda

Te damos una guía sobre cómo el tipo de recipientes para conservar los alimentos.

  • 06 sep 2015

Redacción. A nadie la gusta abrir el lunch y descubrir que el melón picado fermentó, que el pan con que se elaboró el sandwich está aguado o que el aguacate de la ensalada se puso totalmente negro Y es que, en cuestión de refrigerios, la diferencia entre un revoltijo desagradable y un lunch perfecto está en el empaque.

De acuerdo con Adjid Velasco, chef ejecutivo del hotel Fiesta Americana Santa Fe en México, frutas, vegetales, lácteos e incluso carnes pueden mantenerse en buen estado con sencillas recomendaciones a la hora de empacarlos.

'Lo primero es contar con los implementos básicos para transportar alimentos, como contenedores plásticos, papel aluminio, plástico de cocina o bolsas herméticas. Hay que recordar que también es mejor elegir productos que se conserven fácilmente en lugar de ingredientes o guisos delicados', detalla.

El pan, por ejemplo, es uno de los ingredientes más afectados durante el transporte. Al no soportar la humedad, el horneado tiende a reblandecerse cuando se transporta en contacto con otros productos.
'La recomendación en estos casos es llevar todo por separado; pan en un contenedor, verduras y carnes ahumadas en otro. Aunque algunos aderezos o mayonesas pueden llegar a formar una capa protectora sobre la miga de pan, tampoco resulta suficiente para mantenerla en buen estado.

'Si se transporta proteína, como carne de res, aves y quesos, también es recomendable mantenerlos separados de verduras y almidones para no tener un batidillo tras horas de almacenamiento', explica Velasco.

El aluminio y el plástico de cocina resultan ideales para empacar cualquier alimento sólido, pero es importante manipularlos con cuidado para no contaminar los alimentos. Pequeños trozos de papel metálico mezclados con el alimento resultan un riesgo para cualquiera.

Otro detalle a considerar al guardar sandwiches, ensaladas de verduras y cocteles de fruta es el tiempo que permanecerán fuera de refrigeración.'Lo ideal es mantener un lunch a temperatura ambiente por periodos cortos de tiempo. Si no se cuenta con un refrigerador en la oficina, la escuela o el gimnasio la recomendación es elegir preparaciones a base de ingredientes no perecederos o con poco contenido de agua.


'Algunas verduras y frutas, como el melón, cuyo contenido de agua es elevadísimo, deben evitarse en refrigerios de muchas horas de almacenamiento. Pollo y carnes rojas deben cocerse perfectamente para prevenir que se echen a perder', aconseja.

Para Cecilia García, licenciada en nutrición y vocera de Peras USA, la recomendación es siempre elegir verduras, frutas e ingredientes enteros (llamados de mano) para evitar fermentación o pérdida de textura en el lunch. Además de significar una buena fuente de energía, manzanas, peras y todo tipo de nueces resultan más fáciles de transportar.

Foto: La Prensa

La recomendación en estos casos es llevar todo por separado; pan en un contenedor, verduras y carnes ahumadas en otro.


Antes de elegir el lunch es importante recordar que:

EN GENERAL
-Los ingredientes perecederos no deben pasar más de 4 horas fuera de refrigeración
-El jitomate y el melón chino tienden a fermentar rápidamente. ¡Evítelos!
-Los panes no soportan la humedad por lo que deben almacenarse por separado hasta su consumo

PAPEL ALUMINIO
-Para: carnes, aves y verduras cocidas
-Tip: utilícelo únicamente en alimentos cocidos que no requieran volver a calentarse

FILM PLÁSTICO
-Para: rebanadas de pan, carnes curadas, quesos, frutas y verduras enteras
-Tip: coloque los alimentos empacados en film dentro de contenedores rígidos para mayor protección

BOLSAS HERMÉTICAS
-Para: mezclas de hojas verdes, frutas y verduras porcionadas, aderezos, vinagretas y salsas
-Tip: agregue un chorrito de agua para mantener frutas y verduras hidratados