Familia y Hogar
Redacción.
La tecnología es una excelente herramienta si se usa prudentemente, pero su uso puede llegar a ser contraproducente si los adultos prestan más atención a los aparatos electrónicos que a las necesidades de los pequeños. A los menores se les demanda responsabilidad y atención a las órdenes que se les dicta, pero cuando ellos piden que se les escuche, los adultos se encuentran inmersos en el mundo virtual e ignoran a los pequeños.
Consecuencias
Al no recibir la atención necesaria los niños adquieren la misma conducta de su padres y se entretienen con dispositivos electrónicos. Esto produce conflictos, confusiones innecesarias en los menores, hostilidad a la autoridad e indiferencia al mundo real.
Además las relaciones personales cambian porque a los niños se les dificulta expresarse y socializar. El tiempo de los hijos debe ser de calidad para que los menores expresen sus temores, proyectos, sueños, proveerles de un lugar seguro donde puedan ser ellos mismo sin fingir que todo está bien. Así lo explica Magdalena Turcios, psicóloga familiar.
Es importante no hacer uso de la tecnología cuando esté en casa, de lo contrario afectará el núcleo familiar y la comunicación será ineficiente. Se recomienda establecer límites y horarios en los que se pueda usar los aparatos y sobre todo deben ser los adultos los primeros en respetar las reglas.
Consejos
- Compartir actividades con todos los miembros de la casa, como disfrutar de un partido de fútbol, hacer canopy, visitar un museo o un zoológico.
- Mostrar amor a los hijos es importante, incluso la fuerza más poderosa, por esta razón al pasar tiempo de calidad con los menores, los padres muestran lo valiosos que son y que están interesados en su educación y crecimiento personal.